El PSOE mantendrá su programa frente a Suárez en el debate sobre la cuestión de confianza

La oposición socialista contempla con prudencia el debate de la votación de confianza al Gobierno, que comenzará el próximo martes. Su línea básica consiste en mantener los planteamientos hechos en el programa socialista de mayo, explicado durante las sesiones de censura, y recordar al Ejecutivo que ha tenido que acercarse a los planteamientos del PSOE -lucha contra el paro etcétera-, después de perder un tiempo precioso en su ejecución. El margen de maniobra socialista no permite mucho más, porque las sugerencias sobre una «nueva mayoría» no tienen ahora razón de ser.

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La oposición socialista contempla con prudencia el debate de la votación de confianza al Gobierno, que comenzará el próximo martes. Su línea básica consiste en mantener los planteamientos hechos en el programa socialista de mayo, explicado durante las sesiones de censura, y recordar al Ejecutivo que ha tenido que acercarse a los planteamientos del PSOE -lucha contra el paro etcétera-, después de perder un tiempo precioso en su ejecución. El margen de maniobra socialista no permite mucho más, porque las sugerencias sobre una «nueva mayoría» no tienen ahora razón de ser.

Desde el primer partido de la oposición se observa el panorama con mucha cautela. La doble operación suarista -recomposición de la unidad de UCD y acuerdo con la minoría catalana- echa por tierra toda esperanza del PSOE de derribar a Suárez a corto plazo e intentar un eventual Gobierno de gestión, a base de una colaboración socialista-nacionalista- grupos progresistas de UCD. El PSOE había previsto esta crisis de otoño: en declaraciones a EL PAIS, tras la' constitución del cuarto Gobierno Suárez, Felipe González afirmó claramente que dicho Gabinete no podría sostenerse más allá del otoño. Pero la gran maniobra de «censura moral» a Suárez no ha podido tener continuidad, porque las personas de UCD que se necesitaban para apoyarla son ahora ministros del Gobierno Suárez y la Minoría Catalana se dispone a sostener también la nueva situación.Aun con tal estado de cosas, la dirección del PSOE cree que el Gobierno no puede marginar pocompleto a la oposición. El apoyo de la Minoría Catalana proporciona a UCD la mayoría necesaria, pero existen cuestiones en la que sigue siendo precisa la negociación con los socialistas, como es el problema del Consejo de Ad ministración de RTVE, y otras que probablemente no tendrían éxito con la cerrada oposición del PSOE, tales como la ley de divor cio o ciertas decisiones en materia socioeconómica.

La línea general a seguir por lo los socialistas no es otra que la de mantener su oferl a, programática de la moción de censura, reiterar los planteamientos económicos y autonómicos hechos allí y aguardar los acontecimientos de los próximos meses, en los que Suárez puede consolidarse o continuar su deterioro, hasta el punto de que dentro de un año puede volver a hacer crisis la solución gubernamental alcanzada.

Entrevista Felipe González-Luis Gómez Llorente

De cara al debate del martes, Felipe González ha realizado diversos contactos con sus colaboradores, e incluso el pasado jueves mantuvo una conversación de hora y media con. el líder del sector crítico de su partido, Luis Gómez Llorente. Dado que una entrevista similar no se producía desde el interregno entre el 28º congreso y el congreso extraordirtario del PSOE (1979), hemos preguntado a ambos en qué consistió la reunión. Los dos se han mostrado muy lacónicos: fue cun encuentro de amigos, sin especial relevancia política», según Felipe González; «probablemente, una de las muchas conversaciones que el secretario general está celebrando con los compañeros», según Gómez Llorente. Colaboradores de ambos confirman la impresión de que dicha conversación no tiene significados ocultos.

El Grupo parlamentario Socialista apenas trató, en su reunión del pasado viernes, la estrategia de cara a los debates de la semana próxima. Pese a que estuvieron reunidos todo el día, diputados y senadores dedicaron casi todo su tiempo a discutir el reglamento interno del grupo, y sólo al final hubo una intervención del secretario general del mismo, Gregorio Peces-Barba, en la que explicó la estrategia prevista: se trata de niantener la actitud de oposición, criticar al Gobierno por falta de credibilidad de su presidente, juzgar su programa, de acuerdo con lo que ofrezca el Gabinete, y inantener lo que dijo el PSOE en la votación de censura.

Parece que esta vez, Felipe González no se presentará solo -Frente al Gobierno y que distintos dirigentes socialistas saldrán a la tribuna para contestar a los ministros, si el desarrollo del debate les da oportunidad de hacerlo. En cualquier caso, la estrategia concreta de los socialistas será deci,dida por el comité permanente de su grupo el martes por la mañana.