Paralizada la elaboración del Estatuto canario

Tras la ruptura en las negociaciones después de la última reunión de la mesa de partidos, la redacción unitaria del estatuto de autonomía para Canarias entra en una fase de bloqueo. Se aleja por el momento cualquier posibilidad de acuerdo entre las distintas fuerzas que durante las últimas semanas han discutido los borradores del proyecto de texto definitivo.El grupo de organizaciones de izquierda, integrado por PSOE, PCE, Asamblea Majorera (de Fuerteventura) y la Asamblea de Vecinos (de Las Palmas) no llegó a un entendimiento con UCD en la última reunión, considerada clave, de la mesa de part...

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Tras la ruptura en las negociaciones después de la última reunión de la mesa de partidos, la redacción unitaria del estatuto de autonomía para Canarias entra en una fase de bloqueo. Se aleja por el momento cualquier posibilidad de acuerdo entre las distintas fuerzas que durante las últimas semanas han discutido los borradores del proyecto de texto definitivo.El grupo de organizaciones de izquierda, integrado por PSOE, PCE, Asamblea Majorera (de Fuerteventura) y la Asamblea de Vecinos (de Las Palmas) no llegó a un entendimiento con UCD en la última reunión, considerada clave, de la mesa de partidos y, a pesar de los deseos de CD de dar continuidad al diálogo, las negociaciones fueron suspendidas sin plazo fijo.

La izquierda estima que los centristas no han dado respuesta a su petición de fijar en el estatuto un sistema electoral para el Parlamento canario, basado en las circunscripciones insulares y sin añadir otros distritos, como los partidos judiciales, propuestos por UCD.

En las últimas reuniones de la citada mesa, el principal punto de discrepancia había sido, precisamente, dicho sistema electoral, al opinar las fuerzas de izquierda que UCD, con su oferta de partidos judiciales, se aseguraba el control de más del 60% de los escaños del futuro Parlamento canario. Los socialistas, incluso, estuvieron a punto de regresar a la Junta de Canarias, de la que se ausentaron hace más de seis meses, ante la posibilidad de que los centristas cedieran en sus criterios electorales. Como no fue así, decidieron permanecer fuera del órgano preautonómico.

En otros puntos de divergencia, como el reconocimiento de Canarias como nacionalidad, la neutralidad del archipiélago, la decisión sobre la bandera regional, la participación de las islas en asuntos económicos de carácter internacional y la fecha de las elecciones al Parlamento canario, entre otros temas, todas las fuerzas estuvieron dispuestas a una doble redacción de los mismos en el texto autonómico.

Vicente Alvarez Pedreira, senador tinerfeño por UCD y presidente de la Junta de Canarias, señaló a EL PAÍS que «la congelación de las negociaciones no debe prolongarse a pesar de las vacaciones» y se mostró optimista sobre la posibilidad de que el punto de mayor discordia sea superado en una inminente reunión de la mesa de partidos. Por su parte, el también senador y presidente provincial de UCD en Santa Cruz de Tenerife, Alfonso Soriano, no ocultó que «el tema es lo suficientemente importante y grave como para que una demora en su solución de dos o tres meses más no signifique nada». En su opinión, «si a pesar de ello no se logra un consenso en los puntos conflictivos, presentaremos el estatuto en el Parlamento y, como estamos en un país democrático, allí será donde se discuta y se mejore». UCD no pudo remitir al Parlamento el proyecto de estatuto canario a finales del mes pasado, como había previsto, al, dilatarse las negociaciones en la citada mesa.

Alberto de Armas, presidente regional del, PSOE, confesó que, ante la interrupción de las discusiones, su actitud era de «desánimo y desilusión».

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