Irán ha retirado 14 toneladas de oro de bancos occidentales

El Gobierno de Irán ha retirado en los últimos meses catorce toneladas de oro, por valor de trescientos millones de dólares (21.000 millones de pesetas), que se encontraban en bancos británicos, franceses y alemanes occidentales, informa Efe desde Londres.

Las autoridades de Teherán tomaron esa decisión para protegerse contra cualquier nuevo intento de bloquear sus depósitos en Occidente que pudiera ser utilizado para conseguir la liberación de los rehenes estadounidenses.La mayoría del oro retirado por los iraníes, según la información disponible, estaba depositado en bancos británicos...

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El Gobierno de Irán ha retirado en los últimos meses catorce toneladas de oro, por valor de trescientos millones de dólares (21.000 millones de pesetas), que se encontraban en bancos británicos, franceses y alemanes occidentales, informa Efe desde Londres.

Las autoridades de Teherán tomaron esa decisión para protegerse contra cualquier nuevo intento de bloquear sus depósitos en Occidente que pudiera ser utilizado para conseguir la liberación de los rehenes estadounidenses.La mayoría del oro retirado por los iraníes, según la información disponible, estaba depositado en bancos británicos, y los datos de las aduanas del Reino Unido señalan que el pasado mes de abril salieron cerca de nueve toneladas de dicho metal, por valor de 69 millones de libras esterlinas (algo más de 11.200 millones de pesetas).

Según datos de los servicios de aduanas, en los primeros cinco meses de este año salió de territorio británico un total de trece toneladas de oro iraní. En medios bancarios de la City londinense también se señala que el Gobierno de Teherán -a través del banco central de Irán- dispuso la transferencia a bancos británicos de una importante cantidad de divisas extranjeras, aunque se ignora el importe exacto.

La decisión parece contradecir la explicación de que las autoridades iraníes retiraron el oro para evitar cualquier intento de que les congelaran sus depósitos bancarios en Europa occidental.

Sin embargo, en algunos medios se interpretó la decisión iraní como una «muestra de confianza» por parte de Teherán a la estricta interpretación británica de las medidas de sanción contra Irán, que parecía excluir las operaciones financieras,

Otra de las explicaciones posibles, se indica en otros círculos financieros de Londres, es que las altas tasas de interés actualmente vigentes en Gran Bretaña hubieran decidido la transferencia de divisas extranjeras que ordenó el banco central de Irán.

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