Tercera erupción del volcán Santa Helena

El volcán Monte de Santa Helena, en el Estado norteamericano de Washington, al noroeste de Estados Unidos, entró nuevamente en erupción, la tercera en un mes, el pasado jueves y lanzó cenizas y va por a unos catorce kilómetros de altura, según anunciaron las autoridades de Seattle, capital del Estado. Algunos habitantes de la denominada zona roja, en un radio de 32 kilómetros del volcán, fueron inmediatamente evacuadas por la policía.Las ciudades de Portland, en el Estado de Oregón, y Vancuver, en el Estado de Washington, experimentaron una lluvia de cenizas, a consecuencia de la er...

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El volcán Monte de Santa Helena, en el Estado norteamericano de Washington, al noroeste de Estados Unidos, entró nuevamente en erupción, la tercera en un mes, el pasado jueves y lanzó cenizas y va por a unos catorce kilómetros de altura, según anunciaron las autoridades de Seattle, capital del Estado. Algunos habitantes de la denominada zona roja, en un radio de 32 kilómetros del volcán, fueron inmediatamente evacuadas por la policía.Las ciudades de Portland, en el Estado de Oregón, y Vancuver, en el Estado de Washington, experimentaron una lluvia de cenizas, a consecuencia de la erupción, que los geólogos consideran importante. Todos los servicios contra incendios se encuentran en estado de alerta y la población de los dos Estados ha recibido instrucciones para no abandonar sus casas o bien restringir las salidas al mínimo Imprescindible, con uso obligatorio de máscaras contra gases.

Ayer, una pequeña localidad forestal, enclavada a escasa distancia del volcán Monte de Santa Helena, el villorrio de Cougar, recibió una lluvia de cenizas volcánicas compactas, de unos dos centímetros de diámetro.

Mathew Stadler, especialista en seísmos de la Universidad de Seattle, afirmó que la erupción del Monte Santa Helena, la tercera de importancia que se registra desde hace un mes, fue acompañada por un temblor de tierra, cuyo origen hasta el momento no ha podido ser precisado. «No estamos seguros de que se trate de una sacudida telúrica», agregó. Según otros observadores, el temblor obedecería a desplazamientos subterráneos de rocas en estado de fusión.

La lluvia volcánica de cenizas ha provocado una nueva formación nubosa a quince kilómetros de altitud sobre toda la zona, que ensombrece el Sol.

Las predicciones geológicas aseguraban que alrededor del pasado 13 de junio el volcán experimentaría una nueva erupción, en virtud de la proximidad lunar a la Tierra, máxima en aquella fecha. Algunos científicos establecen una correlación entre el campo de gravedad lunar y las sacudidas telúricas.

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