La normalización con China, eje de la diplomacia de Ohira

China fue ayer el primer país en rendir homenaje al fallecido primer ministro japonés, insistiendo en su declaración oficial en «su importante contribución» al desarrollo de buenas relaciones entre Pekín y Tokio.Como ministro de Exteriores en el Gabinete Tanaka, primero, y luego como jefe de Gobierno, Ohira fue el artífice de la normalización diplomática entre los dos grandes países asiáticos y enemigos históricos. Hace apenas dos semanas que Ohira había recibido en Tokio al presidente chino, Hua Guofeng. La visita marcaba, de hecho, la reanudación de los lazos entre las dos potencias o...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

China fue ayer el primer país en rendir homenaje al fallecido primer ministro japonés, insistiendo en su declaración oficial en «su importante contribución» al desarrollo de buenas relaciones entre Pekín y Tokio.Como ministro de Exteriores en el Gabinete Tanaka, primero, y luego como jefe de Gobierno, Ohira fue el artífice de la normalización diplomática entre los dos grandes países asiáticos y enemigos históricos. Hace apenas dos semanas que Ohira había recibido en Tokio al presidente chino, Hua Guofeng. La visita marcaba, de hecho, la reanudación de los lazos entre las dos potencias orientales, llamada a ser uno de los elementos más importantes de este fin de siglo.

Confirmando la aproximación positiva de Tokio a Pekín, Ohira había firmado, durante su visita a la capital china en diciembre pasado, un préstamo de 5.000 millones de dólares, obviamente más político que económico. Quizá por ello, y aunque el premier fallecido no había firmado la paz con Pekín a costa de enemistarse con Moscú, la agencia Nueva China dedicaba ayer un caluroso obituario a Ohira, «autor de importantes contribuciones a la amistad chino-japonesa desde que fue nombrado ministro de Asuntos Exteriores, en 1972».

Tokio, bajo el mandato de Ohira, no sólo se había empeñado en una política de estabilización regional, sino que había hecho de la contemporización con Estados Unidos uno de sus objetivos principales. El déficit comercial entre los dos países no ha dejado de agravarse en los últimos años.

En los últimos meses, y sobre todo a raíz de la crisis iraní y las sanciones contra Teherán pedidas por Washington, Ohira había ido alineando más y más las posiciones de su país con las de la Comunidad Económica Europea, tanto política como económicamente.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Archivado En