Matrimonio desalojado de una vivienda vacía

La policía procedió el pasado lunes al desalojo de una familia que hace varios meses ocupó una casita baja, casi una chabola, en el barrio de Bilbao, a consecuencia de la denuncia presentada por su antigua propietaria ante un juzgado madrileño.La infravivienda en cuestión es el número 141 de la calle de Gutiérre de Cetina, y permaneció vacío durante varios años. Hace unos meses fue ocupada por José Bravo Díaz, trabajador en paro, y su esposa, Rafaela Díaz, que está a punto de dar a luz. A las pocas semanas de la ocupación, recibieron la visita de los hijos de la propietaria de la vivienda, Mer...

La policía procedió el pasado lunes al desalojo de una familia que hace varios meses ocupó una casita baja, casi una chabola, en el barrio de Bilbao, a consecuencia de la denuncia presentada por su antigua propietaria ante un juzgado madrileño.La infravivienda en cuestión es el número 141 de la calle de Gutiérre de Cetina, y permaneció vacío durante varios años. Hace unos meses fue ocupada por José Bravo Díaz, trabajador en paro, y su esposa, Rafaela Díaz, que está a punto de dar a luz. A las pocas semanas de la ocupación, recibieron la visita de los hijos de la propietaria de la vivienda, Mercedes Castro, quienes les amenazaron si no la desocupaban al día siguiente. No pasó nada, sin embargo, y el matrimonio decidió permanecer allí, hasta que el lunes por la noche, dos inspectores de la comisaría de Ventas procedieron al desalojo, les conminaron a sacar sus muebles y precintaron la puerta a continuación.

Los muebles se encuentran ahora apilados en el local de la asociación de vecinos, y el matrimonio duerme precariamente en casa de un familiar. La asociación de vecinos ha manifestado su intención de ayudar a los desalojados a encontrar una nueva vivienda.