Acciones judiciales contra los responsables del destrozo a la bandera del Consejo

La comisión permanente del Consejo Regional de Murcia acordó ayer por unanimidad «reprobar enérgicamente el acto de ultraje a la bandera regional cometido por un grupo de concejales del Partido Cantonal de Cartagena el pasado miércoles», según el comunicado difundido en una conferencia de prensa ofrecida tras la reunión. Por otra parte, el fiscal de la Audiencia Provincial de Murcia ha iniciado expediente judicial en torno a los hechos, y los inquilinos del piso del que fue arrebatada la bandera han presentado demanda contra los concejales que la destrozaron.

En otro orden de cosas,...

La comisión permanente del Consejo Regional de Murcia acordó ayer por unanimidad «reprobar enérgicamente el acto de ultraje a la bandera regional cometido por un grupo de concejales del Partido Cantonal de Cartagena el pasado miércoles», según el comunicado difundido en una conferencia de prensa ofrecida tras la reunión. Por otra parte, el fiscal de la Audiencia Provincial de Murcia ha iniciado expediente judicial en torno a los hechos, y los inquilinos del piso del que fue arrebatada la bandera han presentado demanda contra los concejales que la destrozaron.

En otro orden de cosas, el presidente del Partido Cantonal (Pcan), Carlos Romero, presentó la dimisión ante la ejecutiva del partido, así como los cuatro concejales que participaron en los hechos. El también concejal cantonal y secretario general de la organización, José Bonnet, que no había intervenido en la acción, aunque las versiones iniciales lo daban como participante, no ha dimitido de su cargo.

Ninguna de las dimisiones presentadas ha sido aceptada por la ejecutiva cantonal y se espera la resolución de la crisis provocada en el partido en una asamblea extraordinaria que celebrará el Pcan antes de quince días.

El comunicado del Consejo Regional indica también que su principal objetivo es la construcción y consolidación de una región «que, a través de su Estatuto de Autonomía, defienda democráticamente los intereses de todos los municipios que lo integran, entre los que el de Cartagena ocupa un preeminente lugar por su importancia histórica, cultural y socioeconómica. Y no será rompiendo banderas como podrá culminarse este proceso autonómico».