En defensa de Máximo Puertas
Los abajo firmantes somos un grupo de jóvenes cristianos de Vallecas-Palomeras Altas, los cuales hemos convivido durante cinco años con el padre Máximo Puertas.El móvil que nos impulsa a escribir estas líneas es sentirnos directamente afectados por el tratamiento y deterioro de su persona e imagen.
Nos ha sorprendido mucho la noticia aparecida en EL PAIS de fecha 10 de los corrientes, referente a los problemas que tienen tres sacerdotes de la parroquia Jesús Obrero-barrio San Blas-Simancas con sus superiores dominicos y con el vicario de la zona, en la cual queda involucrado el padre Má...
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Los abajo firmantes somos un grupo de jóvenes cristianos de Vallecas-Palomeras Altas, los cuales hemos convivido durante cinco años con el padre Máximo Puertas.El móvil que nos impulsa a escribir estas líneas es sentirnos directamente afectados por el tratamiento y deterioro de su persona e imagen.
Nos ha sorprendido mucho la noticia aparecida en EL PAIS de fecha 10 de los corrientes, referente a los problemas que tienen tres sacerdotes de la parroquia Jesús Obrero-barrio San Blas-Simancas con sus superiores dominicos y con el vicario de la zona, en la cual queda involucrado el padre Máximo Puertas en «algo» de ninguna manera consecuente con su forma de ser y actuar. Pues, por el tiempo que llevamos conociéndole en esta comunidad de Vallecas, nos consta que Máximo es un sacerdote para nuestro tiempo, ecuánime y equilibrado; equidistante y por encima de minorías sectarias, con dedicación plena que mueve a los que le han conocido y trabajado con él a una constante superación conforme a su conciencia cristiana.
Este es el sentimiento de todas las personas que con él han convivido. Y estamos seguros hubiera sido el mismo si en la parroquia de Jesús Obrero se le hubiera abierto una brecha de comprensión y amor desde sus propios compañeros de sacerdocio.
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