RELIGION

La curia teme abordar la vida de Cristo desde la historia, según Schillebeeckx

El dominico Edward Schillebeeckx, uno de los hombres más famosos de la Iglesia holandesa, está convencido de la necesidad de una «cristología hecha desde abajo hacia arriba», capaz de ayudar al hombre de hoy a «rehacer el camino de los discípulos de Cristo».En una extensa entrevista publicada por el semanario lisboeta Expresso, el teólogo de Nimega, actualmente objeto de un proceso en el Vaticano, explica las razones por las cuales la curia romana tiene miedo de su manera radical y no convencional de abordar la vida de Cristo, no desde el punto de vista del dogma, sino de la historia....

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El dominico Edward Schillebeeckx, uno de los hombres más famosos de la Iglesia holandesa, está convencido de la necesidad de una «cristología hecha desde abajo hacia arriba», capaz de ayudar al hombre de hoy a «rehacer el camino de los discípulos de Cristo».En una extensa entrevista publicada por el semanario lisboeta Expresso, el teólogo de Nimega, actualmente objeto de un proceso en el Vaticano, explica las razones por las cuales la curia romana tiene miedo de su manera radical y no convencional de abordar la vida de Cristo, no desde el punto de vista del dogma, sino de la historia.

Para Schillebeeckx, la Iglesia debe bajar de su cátedra para ir al encuentro «de los hombres de hoy, que tienen dudas acerca de la divinidad de Cristo, acerca de los dogmas, y rehacer con ellos el camino de la fe, llevarlos a comprender la razón por la cual los primeros discípulos llegaron a reconocer a Jesús como el hijo de Dios».

Aun reconociendo el magisterio del Papa y del episcopado, que tienen como misión «velar por la fe de los cristianos y también de los teólogos», el dominico holandés se pregunta: «¿Será que los teólogos deben limitarse a repetir lo que dice el magisterio?».

Para él, los teólogos deben ejercer una función crítica en aquellos dominios en los que el magisterio no es infalible, y esta crítica exige libertad de investigación científica y teológica.

Respecto del celibato sacerdotal, que dividió al episcopado holandés, Schillebeeckx, que se declara a favor del «celibato opcional», afirma que no se trata de una cuestión de dogma, sino de «una decisión histórica del magisterio pastoral», como lo es también la división tripartita de la Iglesia en obispos, clérigos y laicos.

Del papa Juan Pablo II, opina que está fuertemente condicionado por la Iglesia polaca, una iglesia «fuerte, monolítica, uniforme, para luchar y dialogar con el Estado marxista». Para el teólogo, Juan Pablo II quisiera transformar la Iglesia universal según esta imagen, lo que, en su opinión, es peligroso, porque no se adaptaría a una sociedad pluralista o a realidades con las de las iglesias africanas o latinoamericanas de hoy.

Archivado En