ASTURIAS

Cuatro trabajadores, sepultados por un desprendimiento en la mina La Camocha, de Gijón

Al cierre de esta edición existían muy escasas posibilidades de rescatar con vida a los cuatro mineros que permanecen sepultados en la mina de La Camocha, de Gijón, a consecuencia de un desprendimiento. El accidente se produjo a la una de la tarde, cuando los cuatro trabajadores procedían a reparar una pequeña quiebra situada en el nivel C, este, de la sexta planta del pozo. Al iniciarse las labores de rescate le produjo un nuevo derrumbamiento de carbón que obstaculiza seriamente los trabajos.

A última hora de ayer las noticias en torno a este suceso eran muy confusas y contradictorias...

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Al cierre de esta edición existían muy escasas posibilidades de rescatar con vida a los cuatro mineros que permanecen sepultados en la mina de La Camocha, de Gijón, a consecuencia de un desprendimiento. El accidente se produjo a la una de la tarde, cuando los cuatro trabajadores procedían a reparar una pequeña quiebra situada en el nivel C, este, de la sexta planta del pozo. Al iniciarse las labores de rescate le produjo un nuevo derrumbamiento de carbón que obstaculiza seriamente los trabajos.

A última hora de ayer las noticias en torno a este suceso eran muy confusas y contradictorias. Dirigentes sindicales, responsables de la empresa, trabajadores y familiares se encontraban al pie de la boca del pozo en espera de datos esperanzadores que no se confirmaron.Los cuatro mineros atrapados son: Félix Antonio Prieto Marcos, de veinticuatro años de edad; Victorino Blanco, de veinticuatro; Andrés Reyes Pérez, de veinte, y Manuel Leandro Benjamín López, de treinta. Dos son picadores, uno ayudante minero y el otro posteador.

La Camocha pertenece al grupo de la Minero Siderúrgica de Ponferrada, empresa propietaria de la mina de Caboalles (León), en la que recientemente se produjo una catástrofe de unas dimensiones aún superiores a ésta. Las versiones de aquel suceso provocaron una viva polémica. Según las centrales sindicales Comisiones Obreras y UGT, la causa del accidente había sido la explosión de grisú, cosa que desmintió la empresa al dar la versión oficial de un desprendimiento. En las minas de carbón existen dos tipos de accidentes, que suelen tener consecuencias mortales: unos son motivados por el grisú y otros por las caídas de capas de carbón.

Tradicionalmente el grisú ha sido causa de numerosos accidentes provocados por distintos motivos el trabajo con barrenos, la utilización de lámparas de gasolina o carburo para iluminar y cualquier tipo de imprudencias han sido las causas desencadenantes de explosiones generadoras de tragedias en las minas. El grisú puede explosionar simplemente por fumar un cigarro en una parte de la mina en la que está prohibido, por una avería técnica capaz de hacer saltar una chispa o por insuficiente control y vigilancia. En la actualidad, el trabajo con barrenos ha dado paso a martillos perforadores con previa inyección de agua y las lámparas son de baterías o pilas.

En el caso de La Camocha, aunque no ha habido aún ningún tipo de información facilitada por la empresa ni por las centrales sindicales, porque los trabajos de ayer se centraron en el rescate de los mineros sepultados, la versión más generalizada apunta a un derrumbamiento de una capa que se repitió al comienzo de las labores de rescate.

Este suceso coincide con las vísperas de la negociación del convenio colectivo que tiene enfrentados a Comisiones Obreras y la UGT. Esta última central exige una representación paritaria en la comisión deliberadora, pese a estar en minoría en el comité de empresa, para lo que alega que, desde las pasadas elecciones sindicales, la correlación de fuerzas resultó modificada a favor suyo.

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