Ceaucescu anuncia una intensificación del rearme rumano

El presidente rumano Nicolae Ceaucescu anunció ayer que su país intensificará su esfuerzo armamentista, dada la «tensa situación internacional de hoy, la mayor desde la segunda guerra mundial».En su discurso ante el Congreso del Frente de Unidad Socialista. Ceaucescu denunció «las aventuras militaristas» actuales, sin mencionar a Afganistán y la URSS. Las medidas de rearme afectarán al Ejército, las milicias obreras y juveniles.

Las milicias obreras, denominadas Guardias Obreras, entraron en funcionamiento en todas las fábricas, donde poseen armamento ligero y uniformes, desde la invasi...

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El presidente rumano Nicolae Ceaucescu anunció ayer que su país intensificará su esfuerzo armamentista, dada la «tensa situación internacional de hoy, la mayor desde la segunda guerra mundial».En su discurso ante el Congreso del Frente de Unidad Socialista. Ceaucescu denunció «las aventuras militaristas» actuales, sin mencionar a Afganistán y la URSS. Las medidas de rearme afectarán al Ejército, las milicias obreras y juveniles.

Las milicias obreras, denominadas Guardias Obreras, entraron en funcionamiento en todas las fábricas, donde poseen armamento ligero y uniformes, desde la invasión de Checoslovaquia en 1968, en la que no participó Rumania. Estas milicias estuvieron vigentes más de quince años desde la toma del poder por los comunistas. Las milicias juveniles las integran grupos estudiantiles que realizan entrenamiento militar en sus centros docentes.

La delegación rumana se ausentó de la votación condenatoria de la invasión soviética a Afganisián la semana pasada mientras todos los países del Este, con excepción de Yugoslavia, votaban en contra.

En su discurso de ayer, Ceaucescu dijo que los grandes países, refiriéndose a las superpotencias, tienen una gran responsabilidad de arreglar pacíficamente los conflictos, que agregó que, si bien Rumania es partidaria de la paz y las soluciones negociadas, «tiene derecho a ser dueño de su propio país, a su defensa y construir una vida acorde con sus deseos, sin injerencia externa alguna».

Fuentes oficiales rumanas consultadas no han ocultado que las medidas anunciadas por Ceaucescu obedecen a un «relativo temor» y a la necesidad «de estar vigilantes» ante esta situación internacional.

Las medidas anunciadas por el jefe del Estado y del PC rumano tienen un carácter de urgencia innegable por cuanto contravienen los dictados del reciente XII Congreso del partido, celebrado el pasado mes de noviembre, donde se decidió no aumentar los gastos militares y dedicar un alto porcentaje del presupuesto Inicialmente destinado a los mismos para la fabricación de bienes sociales y de consumo, propuesta que Ceaucescu hizo extensible a todos los países.

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Rumanía es un país miembro del Pacto de Varsovia. El servicio militar es obligatorio y dura dieciséis meses en el ejército y fuerza aérea, y dos años en la marina. En julio de 1978, el total de sus fuerzas armadas se estimaba en 180.000 hombres, de los cuales 140.000 integraban el ejército de tierra, 10.000 la armada y 30.000 la aviación. Las fuerzas paramilitares suman 700.000 personas. El presupuesto de Defensa durante el año 1978 alcanzó los mil millones de dólares.

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