Crítica y halagos a Stalin en vísperas del centenario de su nacimiento

Veinticuatro horas antes de que se celebre el centenario del jefe del Estado que durante más años gobernó la Unión Soviética, José Stalin, la agencia de propaganda Novosti ha publicado un artículo crítico de su figura, si bien los soviéticos mantienen su idea de que «sólo mencionar a Stalin después de tantos años de silencio, va a suponer su plena rehabilitación ».

El artículo de la agencia APN, firmado por Guenadi Guerasimov, parece el comienzo de una campaña para situar históricamente a Stalin en el lugar que le fue arrebatado cuando Kruschev inició, en la famosa reunión secret...

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Veinticuatro horas antes de que se celebre el centenario del jefe del Estado que durante más años gobernó la Unión Soviética, José Stalin, la agencia de propaganda Novosti ha publicado un artículo crítico de su figura, si bien los soviéticos mantienen su idea de que «sólo mencionar a Stalin después de tantos años de silencio, va a suponer su plena rehabilitación ».

El artículo de la agencia APN, firmado por Guenadi Guerasimov, parece el comienzo de una campaña para situar históricamente a Stalin en el lugar que le fue arrebatado cuando Kruschev inició, en la famosa reunión secreta del XX congreso del partido (1956) la desestanilización. Al igual que se hace en la Enciclopedia soviética, que dedica cuatro columnas al sucesor de Lenin, en este mismo año en el típico y popular Calendario de pared, aparece la fecha del 21 de diciembre con un dibujo de Stalin y en el reverso su biografía «crítica», el articulista de la agencia nos da una de cal y otra de arena.La URSS no puede borrar definitivamente la figura de Iosef Vissarionovich Djugaslivili, Stalin, «el hombre de acero». Pero debe congeniar cariños y recelos actuales. Se dice ahora que «cometió errores y crímenes que condujeron a represiones masivas», pero, también, de una forma «históricamente objetiva», se subraya el papel del hombre «cuya positiva contribución a la patria soviética es innegable».

Se señala la etapa difícil que le tocó vivir cuando sustituyó a quien, como hombre clave de la revolución, VIadimir Ilich Lenin, vivió poco tiempo para consolidar sus teorías, y se reprocha a Stalin que cogió el testigo y mantuvo un «culto a la personalidad del que siempre había renegado Lenin». Pero todo tiene justificación para quienes ven el negro horizonte que hubiera tenido la URSS si Stalin se hubiera encogido ante los enemigos «exteriores e interiores». Por otra parte, la figura del dictador debe quedar rehabilitada, por lógica, puesto que uno de los postulados de régimen actual es la victoria en la gran guerra patria contra los ataques del fascismo.

En los últimos días, la televisión ha sido amable con la figura histórica del georgiano y recogió en imágenes su semblante peculiar de amplios bigotes y la característica pipa, y en homenajes que le rindieron entonces numerosos oficiales del Ejército que mandaba el actual ministro de la Defensa, Dimitri Ustinov.

Coincidiendo con todas estas declaraciones, el presidente Leónidas Brejnev celebró ayer su 73 cumpleaños «en la intimidad» con sus «camaradas del Buró Político».

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