Los sindicatos Pórtugueses pasan la "factura" a Sa Carneiro

Sin transportes aéreos desde hace una semana, Portugal empieza a pagar la «factura social» de las elecciones del pasado 2 de diciembre.La agitación social que se preveía como consecuencia de la victoria de Alianza Democrática en las elecciones del 2 de diciembre no esperó para iniciarse la formación del nuevo Gobierno.

Aunque el Gobierno y la derecha portuguesa denuncien el carácter político de las huelgas en curso y de otros conflictos que se anuncian, éstos no parecen deberse a una estrategia deliberada de los estados mayores políticos, sino a reacciones de los medios sindicales a la ...

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Sin transportes aéreos desde hace una semana, Portugal empieza a pagar la «factura social» de las elecciones del pasado 2 de diciembre.La agitación social que se preveía como consecuencia de la victoria de Alianza Democrática en las elecciones del 2 de diciembre no esperó para iniciarse la formación del nuevo Gobierno.

Aunque el Gobierno y la derecha portuguesa denuncien el carácter político de las huelgas en curso y de otros conflictos que se anuncian, éstos no parecen deberse a una estrategia deliberada de los estados mayores políticos, sino a reacciones de los medios sindicales a la nueva situación política.

De hecho, nadie pone en tela de juicio la urgencia de la revisión de un elevado número de convenios colectivos que han acumulado en los dos últimos años un atraso de cerca del 50% sobre el aumento del costo de vida.

Pero esta situación objetiva ha sido agravada por reacciones de tipo subjetivo a la consagración electoral de la nueva mayoría con o sin razón, en los medios obreros y sobre lodo en los muchos millares de trabajadores del sector estatal, prevalece el sentimiento de que con el nuevo Gobierno será mucho más difícil hacer triunfar las reivindicaciones planteadas y en muchos casos ya negociadas. De ahí una serie de ultimatos surgidos y que conceden a las respectivas administraciones y al Gobierno un plazo muy corto para resolver los conflictos, acompañados de paros o de anuncios de huelga.

Entre tanto, prosiguen las conversaciones con vistas a la formación del nuevo Gobierno. El Consejo Nacional del CDS acaba de dar un mandato a su presidente, Freitas do Amaral, para negociar con los demás partidos de Alianza Democrática la composición del futuro Gobierno. Aunque el vicepresidente del CDS afirme que es «prematuro» hacer cualquier comentario sobre la cuestión, ya que el presidente Eanes no inició siquiera los trámites con vistas a la formación del -nuevo Gabinete, la prensa portuguesa sigue barajando nombres de «ministrables». El Diario de Noticias, que dirige el reformador Mario Mesquita, publicaba ayer un extenso análisis de «probables futuros ministros» en la misma, encabezada por Sa Carneiro, el presidente del CDS figura como viceprimer ministro encargado de los Asuntos Exteriores. Pinto Balsemao, hasta hace poco dado como «casi seguro» a la cabeza de la diplomacia portuguesa, aparece ahora como ministro adjunto a la presidencia del Consejo.

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