PAIS VASCO

La Diputación de Alava niega haber defraudado

«Resulta incierto, y cualquier acusación en este sentido demuestra una ineptitud flagrante o una malicia inadmisible, afirmar que hayan quedado 3.000 millones o cantidad alguna sin control ninguno, en virtud del exceso entre lo consignado por la anterior Corporación en el presupuesto oficial de .1979, como recaudación tributaria, y lo realmente ingresado por tal concepto.» Esta es una de las afirmaciones con las que ayer la Diputación Foral de Alava salió al paso de las imputaciones hechas el lunes por el comité ejecutivo del PSOE de Euskadi, y que recogió EL PAÍS ayer, en el sentido de que se...

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«Resulta incierto, y cualquier acusación en este sentido demuestra una ineptitud flagrante o una malicia inadmisible, afirmar que hayan quedado 3.000 millones o cantidad alguna sin control ninguno, en virtud del exceso entre lo consignado por la anterior Corporación en el presupuesto oficial de .1979, como recaudación tributaria, y lo realmente ingresado por tal concepto.» Esta es una de las afirmaciones con las que ayer la Diputación Foral de Alava salió al paso de las imputaciones hechas el lunes por el comité ejecutivo del PSOE de Euskadi, y que recogió EL PAÍS ayer, en el sentido de que se realizaba una práctica de «subvaloración sistemática de los ingresos» en los presupuestos de la Diputación Foral de los últimos años.Tras las explicaciones para demostrar lo incierto de que hayan quedado fondos sin control, en la nota entregada por el presidente de la Diputación se reconoce que las, anteriores corporaciones entendieron «que la única forma de defender la autonomía financiera de la provincia era el evitar la publicidad externa de la mayor recaudación, obtenida en virtud de la presión fiscal más afinada y una más eficaz gestión tributaria, utilizando (con este objetivo) la técnica presupuestaria de los créditos adicionales a las partidas consignadas en el presupuesto ordinario inicial».

En cuanto al presupuesto de 1979, el presidente de la Diputación, Emilio Guevara, manifestó «que a partir del mes de enero habrá que liquidar tal ejercicio, y que va a figurar con todo detalle y justificación todo lo que realmente se ha ingresado en 1979, lo que se ha gastado y en qué, y el posible remanente que se adicionará en el presupuesto refundido para 1980».

El presidente dijo también quequería dejar a salvo el prestigio de los empleados de la provincia, y que la insinuación de «posibles comportamientos fraudulentos», de los que habló el PSOE, «es intolerable».

La nota entregada ayer recuerda que las cantidades a abonar al Estado (cupo líquido) se determinan por diferencia entre el «cupo bruto» (recaudación que se calcula obtendría el Estado en la provincia) y los «gastos compensables» (aplicación de standards medio de gastos del Estado en servicios que en Alava presta la Diputación). Y añade que «todas las diputaciones anteriores han entendido que si, por una mayor presión fiscal o gestión tributaria, aumentaba la recaudación, este incremento tenía que aplicarse a financiar en nuestro territorio un mayor nivel de servicios públicos».

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