Confianza en el Pleno del Congreso

Al término de los debates, que se han extendido a lo largo de cuatro semanas y han totalizado un total de 1.047 votaciones, el ministro de Trabajo y diputados de los distintos grupos hicieron un pequeño balance sobre los trabajos de la Comisión y sobre el texto aprobado.Rafael Calvo, ministro de Trabajo. «El Estatuto de los Trabajadores, al concluir los debates, se ha convertido en un texto colegiado, dado el gran número de enmiendas incorporadas al proyecto (más de 160, de las cuales más de la mitad fueron propuestas por los socialistas). En mi opinión, los debates han tenido una gran ...

Al término de los debates, que se han extendido a lo largo de cuatro semanas y han totalizado un total de 1.047 votaciones, el ministro de Trabajo y diputados de los distintos grupos hicieron un pequeño balance sobre los trabajos de la Comisión y sobre el texto aprobado.Rafael Calvo, ministro de Trabajo. «El Estatuto de los Trabajadores, al concluir los debates, se ha convertido en un texto colegiado, dado el gran número de enmiendas incorporadas al proyecto (más de 160, de las cuales más de la mitad fueron propuestas por los socialistas). En mi opinión, los debates han tenido una gran viveza, con intervenciones muy interesantes y, en definitiva, la Comisión ha enriquecido y perfeccionado el proyecto enviado por el Gobierno. Todo hace pensar que el Estatuto sea un instrumento generador de empleo y de potenciación de sindicatos y asociaciones empresariales.»

Joaquín Almunia (PSOE). «No ha concluido más que una de las fases de discusión parlamentaria del proyecto de ley. Hasta ahora, los socialistas hemos luchado por transformar -desde posturas democráticas y renunciando a la demagogia- el texto del Gobierno. Esta lucha en solitario ha surtido ya efectos muy positivos: cambio radical del título III en sentido progresivo, mejora clara del título II y supresión del título IV. En el Pleno nos queda la tarea de hacer valer nuestras reivindicaciones sobre el título I. En todo caso, nos sentimos plenamente satisfechos de nuestra labor.»

Luis Berenguer (UCD). «Los títulos relativos a representación y negociación colectiva han sido aprobados por abrumadora mayoría, lo que implica que las fuerzas políticas mayoritarias (y lo que ellas representan) lo han considerado adecuado. Cualquier manifestación aduciendo que este texto no es aceptado por la mayoría supone no sólo una tergiversación, sino también poner en duda el sistema parlamentario. Por otra parte. a cuantos centran sus motivos de desacuerdo en el título I (derechos individuales) les recordaría aquel proverbio chino que dice "dale un pez a un hambriento y le habrás quitado hoy el hambre. Dale medios para pescar y no volverá a tener hambre"'.»

Marcelino Camacho (PCE). «Es un bodrio engendrado por la CEOE a través de sus pactos con UGT, primero, y de las posturas del PSOE y UCD en la Comisión después. Recorta los derechos de los trabajadores y sólo sirve a los intereses de la patronal. No tenemos nada que ver con este proyecto de ley. »

Antonio Senillosa (CD). «Creo que puede generar nuevos puestos de trabajo y mitigar en parte el paro si los empresarios, aunque fatigados y escépticos, deciden asumir sus responsabilidades y ponerse al frente de la realidad. Si comprenden de unavez que el capitalismo despilfarrador no tiene cabida ya en una sociedad industrial avanzada. Y también si los trabajadores comprenden que sin beneficios para la empresa y sin disciplina laboral no podemos salir de la crisis.»

Emilio Rubiales (PSA). «Es retrógado, ha llegado tarde al Parlamento y va a producir conflictividad. Esperemos que UCD reflexione y enmiende de cara al Pleno errores. De cara a Andalucía, el título de este Estatuto no tiene sentido, puesto que es una ley para una parte de los trabajadores y no para todos los trabajadores. »