Masiva acogida en Granada a la convocatoria de huelga

Por encima del 70% de la población activa de Granada participó ayer en una jornada de paro convocada por CCOO y UGT a nivel provincial, para protestar contra el Estatuto de los Trabajadores y el plan económico del Gobierno y para pedir la revisión de convenios salariales en la provincia.

La huelga, que había sido declarada ilegal por el gobernador civil, señor Sánchez Harguindey, fue igualmente apoyada, por el Sindicato Andaluz de Trabajadores y otras centrales, y su incidencia sobre el desarrollo de la vida ciudadana fue estimada en fuentes sindicales como muy importante.Por sectores, ...

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Por encima del 70% de la población activa de Granada participó ayer en una jornada de paro convocada por CCOO y UGT a nivel provincial, para protestar contra el Estatuto de los Trabajadores y el plan económico del Gobierno y para pedir la revisión de convenios salariales en la provincia.

La huelga, que había sido declarada ilegal por el gobernador civil, señor Sánchez Harguindey, fue igualmente apoyada, por el Sindicato Andaluz de Trabajadores y otras centrales, y su incidencia sobre el desarrollo de la vida ciudadana fue estimada en fuentes sindicales como muy importante.Por sectores, el paro fue total en la construcción (más de 6.000 trabajadores) y el metal (más de 2.000) y superó el 80% de participación en el comercio y la madera, con índices igualmente importantes en los lectores textil, derivados del cemento, limpieza y vidrio, de acuerdo con los datos facilitados por las centrales convocantes.

Los servicios considerados de interés social, tales como autobuses, gasolineras, panaderías y otros contaron, desde primeras horas del día, con la presencia de parejas de la Policía Nacional, que aseguraron el normal funcionamiento de los mismos, a pesar de que los trabajadores de la empresa concesionaria del transporte urbano habían acordado, el día anterior, la realización de tres horas de paro en cada turno. La huelga afectó, asimismo, a la universidad, con paros parciales a lo largo de la mañana en las distintas facultades y escuelas universitarias, así como en el Hospital Clínico y el centro maternal de la Seguridad Social. Algunos centros universitarios terminaron cerrando totalmente antes de mediodía.

En los pueblos, el paro fue prácticamente general en el sector agrícola y alcanzó cotas importantes en algunos otros. En no pocas localidades de provincia, principalmente en el cinturón industrial de la capital y en la costa, la huelga llegó también a ser total. En este sentido, según CCOO y UGT, destacaron las concentraciones y manifestaciones de protesta protagonizadas en Almuñécar, Motril, Maracena, Atarfe, Pinos Puente, Moraleda, Fuente Vaqueros, Iznalloz, Montefrío, Padul y Huétor-Tájar.

Varios miles de trabajadores se concentraron, a las nueve de la mañana, en el edificio de la AISS y sus inmediaciones, donde permanecieron hasta la una del mediodía, bajo una intensa y discreta vigilancia de la policía, que no llegó a intervenir en ningún momento. El único incidente importante que se registró durante la concentración fue la rotura a pedradas de los cristales de un autobús a su paso por la puerta de sindicatos, por parte de varios incontrolados, así como la retención de un fotógrafo de prensa en el interior de un coche policial durante una media hora.

A lo largo del día fueron igualmente detenidas otras diez personas, entre ellas dos dirigentes sindicales del metal -de CCOO y el SAT, respectivamente-, que fueron puestos en libertad sin ningún tipo de cargos en su contra. Los otros ocho detenidos pasaron, sin embargo, a disposición del juzgado, acusados de formar parte de piquetes, aunque fueron también dejados en libertad a primera hora de la noche

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