La Generalitat mantiene una "actitud tibia"

«La campaña que organiza la Generalitat es de carácter institucional y, por tanto, se ha de caracterizar por un aire serio y digno y, al mismo tiempo, no comprometido, en el sentido de alentar simplemente al máximo la participación en el referéndum», afirma Manuel Ortínez, consejero de gobernación de la Generalitat, en una carta remitida a todos los alcaldes de Cataluña.

En la carta, el señor Ortínez afirma también que «la campaña del referéndum del Estatuto -quiero subrayarlo- ha de ser cívica por encima de todo, y en ningún caso ha de provocar que se ensucien aún más las paredes d...

«La campaña que organiza la Generalitat es de carácter institucional y, por tanto, se ha de caracterizar por un aire serio y digno y, al mismo tiempo, no comprometido, en el sentido de alentar simplemente al máximo la participación en el referéndum», afirma Manuel Ortínez, consejero de gobernación de la Generalitat, en una carta remitida a todos los alcaldes de Cataluña.

En la carta, el señor Ortínez afirma también que «la campaña del referéndum del Estatuto -quiero subrayarlo- ha de ser cívica por encima de todo, y en ningún caso ha de provocar que se ensucien aún más las paredes de nuestras ciudades y villas».

Manuel Ortínez ofrece su colaboración, «en lo que esté a nuestro alcance», a los municipios y sugiere que estos organicen los «aspectos del plebiscito que os correspondan, así como aquellos que libremente deseéis asumir».

Parece, pues, claro que, en la práctica, la Generalitat de Cataluña continúa, en el terreno, administrativo, la política establecida por su presidente, quien evitó, estando por ello a punto de originar una crisis, que la Generalitat se pronunciara en favor del sí en el referéndum. No obstante, el consejo ejecutivo, presidido por el señor Tarradellas, pero integrado mayoritariamente por representantes de los partidos, logró hacer pública una nota en favor del sí.

Por otro lado, el señor Ortínez remitió a las 42 entidades de Europa y América que integran a catalanes residentes en el extranjero un telegrama, en el cual ruega que los catalanes agrupados en dichas entidades se informen de su derecho al voto por correo.