Estudios sobre la reconversión energética del sector cementero

Las empresas españolas dedicadas a la fabricación de cementos podrían ser orientadas próximamente por la Administración a utilizar carbón y gas natural en sus procesos productivos, en lugar del fuel-oil que consumen actualmente, según una serie de estudios desarrollados por el Ministerio de Industria y Energía. Otra modalidad de obtención de energía para las industrias cementeras que baraja actualmente la Administración sería la quema de basuras, método ya empleado en otros países con fines industriales.Según los estudios elaborados por la Administración, la reconversión en tal sentido ...

Las empresas españolas dedicadas a la fabricación de cementos podrían ser orientadas próximamente por la Administración a utilizar carbón y gas natural en sus procesos productivos, en lugar del fuel-oil que consumen actualmente, según una serie de estudios desarrollados por el Ministerio de Industria y Energía. Otra modalidad de obtención de energía para las industrias cementeras que baraja actualmente la Administración sería la quema de basuras, método ya empleado en otros países con fines industriales.Según los estudios elaborados por la Administración, la reconversión en tal sentido de la industria cementera española requeriría unas inversiones aproximadas de 2.000 millones de pesetas, fundamentalmente en bienes de equipo que podría suministrar la industria nacional.

El sector cementero español está básicamente orientado a la exportación, ocupando en la actualidad el primer puesto en el ranking mundial por este concepto. La eliminación de las fuertes primas que poseía el fuel-oil hasta la última subida de precios energéticos del pasado mes de julio ha provocado algunos problemas de costes en las empresas del sector. Ahora, las industrias dedicadas a la fabricación de cemento realizan también estudios encaminados a la búsqueda de combustibles alternativos -su proceso productivo utiliza intensivamente energía-, entre los que ocupa lugar primordial el carbón, tanto de producción nacional como importado. Los estudios elaborados por la Administración estiman que la conversión sectorial podría suponer un ahorro aproximado de 100.000 millones de pesetas anuales en importaciones petrolíferas en la próxima década.