Egipto e Israel rechazan la nueva propuesta norteamericana sobre Oriente Próximo

El enviado especial del presidente Carter, Robert Strauss, regresó ayer a Washington sin haber conseguido que Egipto e Israel acepten una propuesta de resolución sobre Oriente Próximo redactada por Estados Unidos.Strauss manifestó que tras sus cuatro días de conversaciones infructuosas intentará convencer a la Administración Carter de que retire su propuesta de resolución al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.

El primer ministro israelí, Menahem Begin, dijo el domingo a Strauss que su país rechazaba completamente el deseo norteamericano de introducir otra resolución, que, de ll...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El enviado especial del presidente Carter, Robert Strauss, regresó ayer a Washington sin haber conseguido que Egipto e Israel acepten una propuesta de resolución sobre Oriente Próximo redactada por Estados Unidos.Strauss manifestó que tras sus cuatro días de conversaciones infructuosas intentará convencer a la Administración Carter de que retire su propuesta de resolución al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.

El primer ministro israelí, Menahem Begin, dijo el domingo a Strauss que su país rechazaba completamente el deseo norteamericano de introducir otra resolución, que, de llevarse a efecto, modificaría la conocida resolución 242, en la que hasta ahora se han basado todos los esfuerzos de paz en Oriente Próximo.

Un comunicado oficial de Tel Aviv indicó que esta actitud norteamericana contradice los compromisos de Washington hacia Israel asumidos en 1975 y confirmados en 1979.

El principal compromiso implica que Estados Unidos no negociará con la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) hasta que ésta no haya reconocido el derecho de Israel a existir como Estado.

No se han dado a conocer los puntos exactos del proyecto estadounidense, pero se cree que contiene una referencia a los derechos del pueblo palestino, lo que en última instancia llevaría a la creación de un Estado palestino, que Israel no está dispuesto a aceptar.

Las reservas egipcias se deben a que el plan no ayudaría a las actuales conversaciones sobre la autonomía del millón de palestinos que viven en CisJordania y Gaza, territorios ocupados por Israel.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

El primer ministro egipcio, Mustafá Jalil, manifestó en una entrevista publicada en El Cairo que la OLP no puede participar en las conversaciones sobre la autonomía porque rechaza el acuerdo de paz egipcio-israelí.

Por otra parte, Menahem Begin calificó ayer de «hecho político importante» la oposición común de Egipto e Israel al proyecto.

Los observadores israelíes subrayan esta coincidencia entre Sadat y Begin, aunque la actitud de cada uno responda a razones diferentes. Subrayan estos comentaristas que una oposición común puede dar motivo de reflexión a Estados Unidos, ya que una superpotencia puede tener intereses que no coinciden con las preocupaciones regionales de los Estados pequeños, y al mismo tiempo «debe llevar a Egipto y a Israel, aun a costa de importantes concesiones, a coordinar mejor su política», según escribía ayer el periódico israelí Yedioth Aharonoth.

Archivado En