Los veinticinco alcaldes sevillanos ponen fin a su encierro en la Diputación

Los veinticinco alcaldes de pueblos de la provincia de Sevilla encerrados desde el pasado miércoles en el palacio de la Diputación sevillana pusieron fin a su encierro a mediodía de ayer. Esta decisión fue adoptada por los alcaldes tras valorar «como un paso importante» la entrevista mantenida el pasado día 13 con el vicepresidente segundo del Gobierno, Fernando Abril.Los alcaldes sevillanos, en rueda de prensa, manifestaron que el abandono del encierro es una tregua que conceden al Gobierno: «Si el próximo jueves, día 16, no hay una respuesta concreta a las reivindicaciones planteadas, volver...

Los veinticinco alcaldes de pueblos de la provincia de Sevilla encerrados desde el pasado miércoles en el palacio de la Diputación sevillana pusieron fin a su encierro a mediodía de ayer. Esta decisión fue adoptada por los alcaldes tras valorar «como un paso importante» la entrevista mantenida el pasado día 13 con el vicepresidente segundo del Gobierno, Fernando Abril.Los alcaldes sevillanos, en rueda de prensa, manifestaron que el abandono del encierro es una tregua que conceden al Gobierno: «Si el próximo jueves, día 16, no hay una respuesta concreta a las reivindicaciones planteadas, volveríamos a tomar la actitud de presión más conveniente», declaró a EL PAIS un portavoz de los alcaldes.

El presidente de la Diputación el socialista Manuel del Valle, valoró positivamente la entrevista, a pesar de que han quedado temas de gran interés sobre la mesa. «Los puntos que se han conseguido son importantes a medio y largo plazo: que los fondos del empleo comunitario se planifiquen por semestres era una reivindicación tanto de los alcaldes como del presidente de la Diputación, y ese punto se ha logrado», manifestó textualmente el señor Del Valle.

Por otra parte, se considera como un avance positivo el que la Diputación, representación política de los ayuntamientos, colabore con el Gobierno Civil en la distribución de los fondos para el empleo comunitario y que los organismos inversores queden supeditados a las decisiones que adopten las diputaciones de acuerdo con los gobiernos civiles.