El INI, FlAT y seis bancos españoles han llegado a un acuerdo marco sobre el futuro de SEAT

El Instituto Nacional de Industria, un grupo de bancos españoles accionistas de SEAT y la sociedad italiana FIAT han llegado a un acuerdo marco sobre el futuro de sus participaciones y posiciones gerenciales en la compañía automovilística española. El acuerdo supone la toma de la gestión por parte de FIAT, la puesta en marcha de un plan de reestructuración que integrará a SEAT en la red de ventas y producción de la sociedad italiana, la toma de una posición mayoritaria de FIAT en el año 1981 y la garantía de los puestos de trabajo y nivel de tecnología de la sociedad española.

El contra...

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El Instituto Nacional de Industria, un grupo de bancos españoles accionistas de SEAT y la sociedad italiana FIAT han llegado a un acuerdo marco sobre el futuro de sus participaciones y posiciones gerenciales en la compañía automovilística española. El acuerdo supone la toma de la gestión por parte de FIAT, la puesta en marcha de un plan de reestructuración que integrará a SEAT en la red de ventas y producción de la sociedad italiana, la toma de una posición mayoritaria de FIAT en el año 1981 y la garantía de los puestos de trabajo y nivel de tecnología de la sociedad española.

El contrato es el resultado de las negociaciones mantenidas por el INI con FIAT a lo largo de un año y que han pasado por diversas fases alternativas. Los bancos españoles han estado informados e implicados en las negociaciones y han dado su inicial conformidad.Tanto el comité de empresa de SEAT como UGT y CCOO, centrales preponderantes en la sociedad, han recibido también información a través del presidente de SEAT y del propio INI sobre los elementos industriales del contrato, y con menos detalle de otros aspectos del mismo.

La posición sindical frente a la operación es inicialmente reticente. Sin estar claramente en contra de la posición preponderante de FIAT, critican el desarrollo de las negociaciones y consideran que FIAT se lleva la parte de león y consigue entrar o salir de SEAT, a su voluntad, según las perspectivas que ofrezca la sociedad al finalizar 1981.

Contenido del acuerdo

El acuerdo con FIAT supone básicamente trasladar el liderazgo de la sociedad a la empresa italiana y proceder a una reestructuración, que supondrá inversiones de casi 60.000 millones de pesetas en tres años.

Al cabo de los mismos, SEAT fabricará prácticamente en exclusiva varios modelos, probablemente el Ritmo, el Zero, una furgoneta ligera y el actual 127. Estos modelos producidos en España cubrirán buena parte del mercado europeo. El resto de gama de modelos FIAT para el mercado interior vendrá de otras plantas de producción sin cargas arancelarias.

La eficacia del acuerdo al final del período de desarrollo de la reestructuración (hasta el 31 -XII- 1981) queda pendiente del cumplimiento sustancial de una serie de compromisos ajenos a la gestión de la sociedad, que en síntesis son los siguientes:

- Libertad de precios en el interior.

- Concesión de jornadas de regulación de empleo, siempre que los stocks superen las 45.000 unidades. Se estima que esto supondrá treinta días de regulación al año.

- Facilidades para la movilidad de personal en la planta de la zona franca de Barcelona, y de paso a la planta de Martorell.

- Cumplimiento del plan financiero con créditos nacionales, oficiales y privados sin aval de FIAT.

- Aplicación de los beneficios previstos en los recientes decretos de regulación del sector del automóvil y prórroga de los concedidos por la calificación de industria de interés preferente.

- Autorización para el traslado de equipos y la entrada de los mismos con reducción de aranceles para proceder a la reestructuración de las líneas de producción. Asimismo, autorización para la suscripción mayoritaria de acciones de SEAT por parte de FIAT.

El cumplimiento sustancial, con arbitraje Je la Cámara de Comercio de París, de estas condiciones será previo a la toma de la posición mayoritaria de FIAT.

En la parte financiera, el contrato supone proceder de inmediato a una ampliación de capital por valor de 6.088 millones de pesetas, de forma que el INI suscribe 2.273 (37,34%); FIAT, 2.373 (38,98); Urquijo, 193 (3,17); Hispano, 121 (1,99); Vizcaya, 83 (1,37); Central, 82 (1,35); Bilbao, 66 (1,08), y Banesto, 63 (1,04%). El resto, 833 millones, corresponde a accionistas privados que no acudirán, previsiblemente, a la ampliación, ya que las acciones cotizan por debajo de la par. Esta parte será suscrita prácticamente a partes iguales por INI y FIAT, que mejorarán de esta forma sus participaciones. En el primer semestre de 1980 se procederá a otra ampliación de capital en idénticas condiciones. Además de estas aportaciones de capital, están previstos créditos oficiales por 12.000 millones privados por una cantidad ligeramente inferior y obligaciones por 8.000 millones de pesetas.

Acabado el proceso reestructurador, FIAT compraría a los otros socios todas las acciones procedentes de las dos ampliaciones de capital, pagando por estos títulos el nominal más los intereses devengados desde su desembolso. Esto supone que FIAT tome el 80% de la sociedad, quedando el INI con el resto.

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