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Juan Carlos Gómez Peña,

niño de tres años, de Castellón, enfermo grave del hígado, pudo obtener un medicamento de difícil localización en el mercado gracias a unos radioaficionados. Las llamadas de socorro de los radiciafícionados fueron atendidas en Baden-Baden y Munich (República Federal de Alemania), donde pudieron encontrarse muestras del fármaco Lysodrenn, un producto que se fabrica en unos laboratorios de California (Estados Unidos) y del que ya casi no quedan existencias en el mercado. Sin embargo, a raíz del llamamiento de los radioaficionados, también aparecieron ejemplares del fármaco en el Hospital Clínico...

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niño de tres años, de Castellón, enfermo grave del hígado, pudo obtener un medicamento de difícil localización en el mercado gracias a unos radioaficionados. Las llamadas de socorro de los radiciafícionados fueron atendidas en Baden-Baden y Munich (República Federal de Alemania), donde pudieron encontrarse muestras del fármaco Lysodrenn, un producto que se fabrica en unos laboratorios de California (Estados Unidos) y del que ya casi no quedan existencias en el mercado. Sin embargo, a raíz del llamamiento de los radioaficionados, también aparecieron ejemplares del fármaco en el Hospital Clínico Universitario de Valencia.

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