La zona de Europa más propensa a movimientos telúricos

Yugoslavia está situada en una de las zonas de Europa más propensas a las sacudidas sísmicas. Ya en 1963 este país sufrió un violento terremoto, que afectó principalmente a la ciudad de Skopje, capital de Macedonia, y fue prácticamente destruida, con un balance de más de 2.000 víctimas. Sus numerosas mezquitas y sus viejos barrios orientales desaparecieron.El Mediterráneo es una zona amenazada por los seísmos porque en ella convergen dos placas continentales: Eurasia y Africa. Según una hipótesis reciente, el Adriátíco, la parte oriental de Italia, la llanura del Po, la mitad sur de los Alpes ...

Yugoslavia está situada en una de las zonas de Europa más propensas a las sacudidas sísmicas. Ya en 1963 este país sufrió un violento terremoto, que afectó principalmente a la ciudad de Skopje, capital de Macedonia, y fue prácticamente destruida, con un balance de más de 2.000 víctimas. Sus numerosas mezquitas y sus viejos barrios orientales desaparecieron.El Mediterráneo es una zona amenazada por los seísmos porque en ella convergen dos placas continentales: Eurasia y Africa. Según una hipótesis reciente, el Adriátíco, la parte oriental de Italia, la llanura del Po, la mitad sur de los Alpes y el oeste de Yugoslavia forman una especie de cordillera que pertenece a la placa continental africana y empuja directamente a la placa de Eurasia. Skopje sería uno de los puntos de la línea de contacto de los dos continentes.

En esta misma zona, Turquía, Italia y Rumania han sido víctimas de numerosos terremotos. La península de Anatolia, en Turquía, se ha visto sacudida repetidas veces por terremotos, con un balance de 27.000 muertos (1939, 1967 y 1970). Este país ha sufrido otros seísmos: Varto (1966, 44.000 muertos), Ankara (1966, 2.500 muertos), Lice (1975, 5.000 muertos) y Van (1977, 4.000 muertos).

Italia, tierra de terremotos, ha sufrido en los dos últimos siglos más de 10.000 sacudidas sísmicas. En 1908, el terremoto de Messina arrojó un balance de 100.000 muertos, y el de 1915, de Avezano, produjo un total de 30.000 víctimas. Recientemente hubo otro en Sicilia (1968, seiscientos muertos), y el último, en mayo de 1976, que devastó el Friuli, con un total de 1.200 víctimas.

El último terremoto registrado en esta zona fue el de Rumania, en marzo de 1977, que produjo más de mil muertos, 15.000 heridos y cerca de 80.000 personas sin hogar. Este terremoto fue especialmente grave porque afectó a Bucarest, su capital, dañando seriamente su potencial económico, ya que numerosos centros industriales estaban situados en la zona siniestrada.

El último terremoto, con elevado número de muertos, se produjo en Irán. De hecho, los tres últimos grandes movimientos telúricos se han registrado en el país asiático, con un balance combinado de 7.000 muertos.