Investidura del presidente del Gobierno

"El discurso del presidente no es un programa, sino una declaración de intenciones"

«El discurso del presidente me ha parecido más una amplísima declaración de intenciones que un programa concreto de acción que afronte con soluciones viables los grandes problemas del país, como la democratización efectiva, la quiebra económica, el paro, los proyectos autonómicos o el desamparo internacional», dijo Javier Arzallus, diputado del Partido Nacionalista Vasco (PNV).El señor Arzallus expresó suimpresión de que la legislatura empezaba con mal pie y señaló que durante la sesión de la mañana más que una investidura parecía que el Congreso asistía a una embestidura. Criticó la evitación...

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«El discurso del presidente me ha parecido más una amplísima declaración de intenciones que un programa concreto de acción que afronte con soluciones viables los grandes problemas del país, como la democratización efectiva, la quiebra económica, el paro, los proyectos autonómicos o el desamparo internacional», dijo Javier Arzallus, diputado del Partido Nacionalista Vasco (PNV).El señor Arzallus expresó suimpresión de que la legislatura empezaba con mal pie y señaló que durante la sesión de la mañana más que una investidura parecía que el Congreso asistía a una embestidura. Criticó la evitación del debate, «tal vez -dijo- porque no se estaba en situación de afrontarlo». Aludió al respaldo parlamentario obtenido por el presidente y justificó el no de su partido en la conducta consecuente del PNV. «Si hubiéramos estado ante un hombre nuevo, tal vez hubiéramos otorgado nuestra confianza en virtud de nuestro optimismo, pero el nuevo presidente tiene tras sí un pasado difícil y lleno de escollos, que hace inevitable la comparación de sus palabras de futuro con las realidades pasadas», agregó.

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El representante del PNV hizo una relación de agravios al País Vasco, iniciados con la derogación del decreto de guerra abolitorio del régimen económico-administrativo de Guipúzcoa y Vizcaya -que calificó de «burla para el pueblo vasco»- y terminando por el fracaso de la disposición adicional negociada con el Gobierno y que no llegó a incluirse en la Constitución.

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