Acuerdo hispano-mexicano para suministro y refino de petróleo

CAMPSA -monopolio español de petróleo- y Pemex -compañía mexicana que administra la explotación de hidrocarburos- han llegado aun acuerdo de colaboración que se plasmará en breve plazo en una serie de operaciones que suponen una toma de posición de la compañía mexicana en el sector español del refino y un contrato de suministro de crudo.Pemex es en estos inomentos una de las compañías esirella en el mundo del petróleo. México se convertirá, en la década de los ochenta, en el tercer o cuarto productor mundial de crudos y en uno de los principales exportadores.

El acuerdo de Pemex y CAMP...

CAMPSA -monopolio español de petróleo- y Pemex -compañía mexicana que administra la explotación de hidrocarburos- han llegado aun acuerdo de colaboración que se plasmará en breve plazo en una serie de operaciones que suponen una toma de posición de la compañía mexicana en el sector español del refino y un contrato de suministro de crudo.Pemex es en estos inomentos una de las compañías esirella en el mundo del petróleo. México se convertirá, en la década de los ochenta, en el tercer o cuarto productor mundial de crudos y en uno de los principales exportadores.

El acuerdo de Pemex y CAMPSA se inscribiría dentro del marco de relaciones comerciales hispano-mexicanas, iniciado tras la visita de los Reyes de España a ese país.

Estos días visitan diversas instalaciones y empresas participadas de CAMPSA altos directivos de Pemex, entre los que se encuentran Jorge Díaz Serrano, director general, y Rafael Izquierdo, asesor de inversiones extranjeras del presidente López Portillo.

Aunque aún no se han facilitado datos concretos sobre las conversaciones entre ambas empresas, se considera probable que México llegue a suministrar hasta diez millones de toneladas de crudo anuales y que participe en proyectos de refino a desarrollar en España que implican ampliaciones de capacidad e inversiones en equipos FTC de refinerías españolas para obtener productos ligeros, como gasolinas y naftas, en sustitución de pesados, como fuel-oil. Esta ampliación se destinaría a cubrir operaciones de exportación por cuenta de Pemex, que de esta forma colocaría productos refinados en Europa con mayor valor añadido en lugar de crudos.

De confirmarse estos proyectos. España se convertiría en plataforma de penetración de productos mexicanos en Europa. Al mismo tiempo, se conseguiría diversificar nuestros suministros energéticos, con las ventajas estratégicas que ello supone.