Los médicos de la Seguridad Social rechazan toda responsabilidad en el caos sanitario

La Sección de la Seguridad Social (SS) del Colegio de Médicos de Madrid, que agrupa a los titulares de los ambulatorios de la provincia, ha difundido un comunicado en el que formulan un llamamiento a la opinión pública, en defensa de la «campaña desatada para desprestigiar a la profesión médica». Dicho llamamiento señala su intención de «situar en sus justos términos un problema que nos afecta a todos y que cada cual se atenga y asuma las responsabilidades que le correspondan».Los médicos de la SS destacan su papel de meros ejecutores de un caótico ordenamiento sanitario, en cuya creación, ges...

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La Sección de la Seguridad Social (SS) del Colegio de Médicos de Madrid, que agrupa a los titulares de los ambulatorios de la provincia, ha difundido un comunicado en el que formulan un llamamiento a la opinión pública, en defensa de la «campaña desatada para desprestigiar a la profesión médica». Dicho llamamiento señala su intención de «situar en sus justos términos un problema que nos afecta a todos y que cada cual se atenga y asuma las responsabilidades que le correspondan».Los médicos de la SS destacan su papel de meros ejecutores de un caótico ordenamiento sanitario, en cuya creación, gestión y desarrollo aseguran no han participado. «Los médicos -añaden- nos hemos visto obligados a trabajar en la SS en unas condiciones que nos han sido dadas y a ser cómplices involuntarios de unas instituciones que no nos han gustado nunca.» Los representantes de dicho colectivo rechazan la identificación entre los médicos y el Instituto Nacional de Previsión, ya que ellos no son sino asalariados al servicio del órgano gestor de la SS y que también contribuyen con parte de su salario a engrosar los fondos de la SS.

El comunicado admite que la medicina realizada en los ambulatorios es de muy baja calidad y llama la atención sobre el papel esencial de dichos centros en el ordenamiento sanitario español. «Si los facultativos que trabajan en los ambulatorios deciden un día ir a la huelga -actitud no adoptada en los últimos 35 años-, la asistencia sanitaria sufriría un colapso total y absoluto.» Más adelante, los médicos de estos centros denuncian el grado máximo de irritabilidad alcanzado en la relación médico-enfermo, consecuencia de la masificación alcanzada en ciertas zonas de Madrid, fruto de la mala planificación, mientras en otras existe hasta superávit de dotaciones.

«Nosotros declinamos toda responsabilidad colectiva en las deficiencias, errores y fracasos de la asistencia que prestamos mientras en los ambulatorios no se cumplan las normas mínimas exigidas por la Organización Mundial de la Salud para un buen ejercicio profesional. Asimismo, repudiamos los casos de abusos, privilegios o corrupción y nos negamos a asumirlos colectivamente, siendo únicamente imputables a título personal a sus directos protagonistas.»

Finalmente, tras preguntarse por el rumbo y viabilidad de la críptica reforma sanitaria, los médicos piden a los asegurados «apoyo y comprensión en el intento de buscar un restablecimiento de la confianza mutua en estas difíciles circunstancias actuales».

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