Cataluña y el País Valenciano se disputan el puerto de Aragón

El próximo mes de octubre se celebrará la primera cumbre de los cuatro presidentes de las comunidades integrantes del antiguo Reino de Aragón. La iniciativa, que surge de la Diputación General de Aragón, pretende reunir en Jaca al presidente de la Generalidad de Cataluña, Josep Tarradellas-, al presidente del País Valenciano, José Luis Albiñana-, al titular del Consejo Interinsular de Baleares, Jerónimo Alberti, y al propio presidente aragonés, Juan Antonio Bolea, según ha podido saber EL PAIS en fuentes próximas a.la Diputación General.El objetivo de este primer contacto oficial se cen...

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El próximo mes de octubre se celebrará la primera cumbre de los cuatro presidentes de las comunidades integrantes del antiguo Reino de Aragón. La iniciativa, que surge de la Diputación General de Aragón, pretende reunir en Jaca al presidente de la Generalidad de Cataluña, Josep Tarradellas-, al presidente del País Valenciano, José Luis Albiñana-, al titular del Consejo Interinsular de Baleares, Jerónimo Alberti, y al propio presidente aragonés, Juan Antonio Bolea, según ha podido saber EL PAIS en fuentes próximas a.la Diputación General.El objetivo de este primer contacto oficial se centraría, fundamentalmente, en dos cuestiones: la puesta en marcha del ferrocarril Canfranc-Pau y la elección del puerto que dé salida al Mediterráneo a los productos aragoneses. Sobre este último punto existe un conato de fricción entre catalanes y valencianos, que en un futuro próximo bien podría originar una guerra de puertos. El presidente valenciano, José Luis Albiñana, presentó un amplio dossier al presidente aragonés, Juan Antonio Bolea, en la entrevista que ambos mantuvieron en Zaragoza el pasado 9 de septiembre, sobre el tema del ferrocarril y una parte del documento incluía además la propuesta por parte de los valencianos de potenciar el puerto de Sagunto .para canalizar el transporte de los productos aragoneses. Esta iniciativa fue muy bien acogida por el presidente Boleá, quien, dos días después, recibió idéntico ofrecimiento de la Generalidad de Cataluña, a través de una comisión del Bajo Ebro.

Esta comisión pretendería convertir a San Carlos de La Rápita en el superpuerto tarraconense que absorbería el movimiento comercial de Aragón. La Diputación General aún no ha decididonada al respecto, pero las mencionadas fuentes señalaron a EL PAIS que es proyecto del autogobierno aragonés potenciar la provincia más marginada de la comunidad, Teruel, y esto sólo se lograría utilizando.la vía de Sagunto. La industrialización de Zaragoza se ha potenciado mediante la línea comercial Bilbao-Zaragoza- Barcelona (por el Bajo Ebro), lo que ha contribuido indudablemente a que la marginación de Teruel haya sido hasta ahora casi total. Con la nueva vía valenciana se potenciaría un importante movimiento económico para los turolenses, «que buena falta les hace», comentó la mencionada fuente aragonesa.

Este tema podría producir desavenencias con los catalanes, que se sumarían a las ya existentes sobre el problema del trasvase del Ebro.

La otra cuestión, la del ferrocarril Canfranc-Pau, también acerca a aragoneses y valencianos, Estos últimos están interesados en la reapertura inmediata del tráfico internacional del último tramo de esta línea (cuyo recorrido total sería: Valencia-Caminreal-Teruel-Zaragoza-Canfranc-Pau), ya que así dejarían de depender de la frontera catalana de Port Bou, cuya densidad de tráfico obliga a invertir más tiempo del necesario a los transportistas de cítricos y demás productos valencianos destinados a la exportación y que significa además el ahorro de doscientos kilómetros de recorrido que se evitarían en el momento en que Renfe decida la reapertura de la línea Canfranc-Pau. La compañía de ferrocarriles mantiene una extraña postura al respecto, pues asegura que tal vía carece de rentabilidad y por este motivo tiene paralizada la terminación de un proyecto en el que se han invertido ya muchos millones de pesetas.

Otros temas a tratar en la citada cumbre de octubre serían el fortalecimiénto de la solidaridad interregional entre los cuatro territorios y el debate sobre la situación de los emigrados aragoneses,a Barcelona -actualmente se contabilizan en número aproximado a los 350.000- y al País Valenciano, adonde se desplazaron 12.000 turolenses.

Los primeros contactos entre los presidentes del antiguo reino de la Corona de Aragón se celebraron cuando Jerónimo Alberti tomó posesión de su cargo como presidente de Baleares (a excepción de Albiñana, que envió a un representante) y con la visita de éste a Zaragoza.

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La cumbre de octubre será sin duda el primero y más importante paso para el acercamiento de las cuatro comunidades que históricamente han estado siempre ligadas entre sí y que mantienen intereses económicos, sociales y culturales.

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