Carrillo discute con Marchais la oposición del PCF a la entrada española en la CEE

Camino de Corea, hacia donde viaja este miércoles el secretario general del Partido Comunista de España, Santiago Carrillo mantuvo una entrevista con su homólogo francés, Georges Marchais. Los problemas planteados por la entrada de España en el Mercado Común, a la que se opone el Partido Comunista francés (PCF), fue el tema de fondo de la conversación. Delegaciones de ambos partidos se reunirán próximamente para examinar dicha cuestión.

El señor Carrillo llegó a París el lunes último para resolver cuestiones personales y de paso hacia Corea, país al que ha sido invitado por el jefe del ...

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Camino de Corea, hacia donde viaja este miércoles el secretario general del Partido Comunista de España, Santiago Carrillo mantuvo una entrevista con su homólogo francés, Georges Marchais. Los problemas planteados por la entrada de España en el Mercado Común, a la que se opone el Partido Comunista francés (PCF), fue el tema de fondo de la conversación. Delegaciones de ambos partidos se reunirán próximamente para examinar dicha cuestión.

El señor Carrillo llegó a París el lunes último para resolver cuestiones personales y de paso hacia Corea, país al que ha sido invitado por el jefe del Estado y líder del Partido Comunista, Kim Il-sung. Allí asistirá a ceremonias oficiales relacionadas con el aniversario del régimen. Según pudo saber anoche EL PAÍS de fuentes competentes, fue el señor Carrillo quien tomó la iniciativa de telefonear al señor Marchais, que, inmediatamente, lo recibió con objeto de dialogar sobre problemas de interés común y esencialmente sobre las divergencias entre ambas formaciones, a propósito de la adhesión española a la Comunidad Económica Europea.Ambos líderes comunistas expusieron sus tesis respectivas sobre el problema. El señor Carrillo subrayó ante su interlocutor tres argumentos a su entender principales: primero, que el ingreso de España en la CEE favorecería el proceso de democratización. Segundo, que la integración total de España se realizará a lo largo de varios años y ello propiciaría la solución de todos los problemas que se plantean. Tercero, que España ya es un país desarrollado y en consecuencia su competitividad no sería tan desastrosa para la agricultura francesa como lo prevé el PCF.

El señor Marchais reiteró a su colega comunista las objeciones de su partido, y de una manera general parece ser que estimó políticamente que «es más fácil transformar, en el sentido socialista, a una Europa de nueve países que a una Europa ampliada».

Las fuentes ya indicadas aseguraron que al final de la entrevista el líder político español halagó las buenas disposiciones que había manifestado el señor Marchais durante la conversación y añadió: «Esto, naturalmente, no prejuzga un eventual cambio de actitud del PCF. Lo cierto es que hemos llegado a un acuerdo para celebrar una reunión de delegaciones de los dos partidos en París. Probablemente tendrá lugar el mes de octubre inmediato y aún no se ha fijado el nivel de la misma. En la reunión referida se profundizará el estudio de todos los problemas.

El político español, anoche, aseguró, aludiendo a las relaciones entre los dos partidos comunistas: «Mantenemos posiciones diferentes en algunos puntos, pero existe una voluntad mutua para que nuestras relaciones sean buenas.»

Ayer, en el mismo momento en que dialogaban los jefes de los dos partidos, el secretario general de la Confederación General de Trabajadores (CGT), Georges Seguy, dirigente del PCF, en París, en un mitin nacional destinado a enfocar la actitud de la central más potente del país -dos millones largos de afiliados- cara a la nueva temporada política, condenó una vez más la entrada de España en el Mercado Común.

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