Bibliotecas populares

Hace un par de meses leí en este periódico un artículo, con bastante extrañeza, en el que se hacía referencia a que en esta capital, donde tantos barrios tenemos, solamente en unos diecisiete de ellos había una Biblioteca Popular. Pues bien, en contraste a eso quiero significarle que el pueblecito de Navas del Rey de esta provincia, que apenas tiene unos mil habitantes, hay una Biblioteca Popular, que en la actualidad cuenta con más de doscientos volúmenes a más de ciertos ingresos vitalicios. Esta biblioteca fue fundada en el año 1970 por el maestro nacional jubilado, don Eloy Nogales. Es cie...

Hace un par de meses leí en este periódico un artículo, con bastante extrañeza, en el que se hacía referencia a que en esta capital, donde tantos barrios tenemos, solamente en unos diecisiete de ellos había una Biblioteca Popular. Pues bien, en contraste a eso quiero significarle que el pueblecito de Navas del Rey de esta provincia, que apenas tiene unos mil habitantes, hay una Biblioteca Popular, que en la actualidad cuenta con más de doscientos volúmenes a más de ciertos ingresos vitalicios. Esta biblioteca fue fundada en el año 1970 por el maestro nacional jubilado, don Eloy Nogales. Es cierto que en los primeros años el número de lectores era muy reducido, pero en la actualidad pueden justificarse más de veinte volúmenes de salida diarios de la biblioteca. El reglamento de la misma autoriza el sacar libros para su lectura domiciliaria por un período de diez días, por tanto, es presumible que por lo menos dos o tres personas lean cada volumen, lo que nos dará un número de lectores muy considerable para población tan reducida Por esta razón en estos dos últimos años el incremento de los lectores se debe principalmente a todos los maestros nacionales del Grupo Escolar que predican con el ejemplo a los niños la cultura que se proyecta donde hay bibliotecas populares. Quiero también resaltar la labor positiva del Ayuntamiento del pueblo, pues para ello cedió el local, contribuyendo también con unos pequeños emolumentos de estímulo a la señorita bibliotecaria para su dedicación a ella. El fundador de esta biblioteca, dada su avanzada edad, ha cedido a la Sección de Bibliotecas de la Excelentísima Diputación Provincial de Madrid los derechos de control y Administración de la misma.