Querella contra el director de la residencia sanitaria de Palma de Mallorca
La viuda del marinero Pedro Muñoz Ripoll, perteneciente a la tripulación de la motonave Santa Cruz de Tenerife, tiene el propósito de querellarse contra el director de la residencia Sanitaria de la Seguridad Social de Son Dureta, por considerarle responsable subsidiario de la muerte de su marido, quien falleció de una afección cardíaca después de que se le negara el ingreso en dicho centro sanitario.
La muerte acaeció el pasado 28 de marzo, y a raíz del hecho, el Sindicato Libre de la Marina atacó agriamente al sistema burocrático de nuestro país y, concretamente, a la Seguridad Soc...
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La viuda del marinero Pedro Muñoz Ripoll, perteneciente a la tripulación de la motonave Santa Cruz de Tenerife, tiene el propósito de querellarse contra el director de la residencia Sanitaria de la Seguridad Social de Son Dureta, por considerarle responsable subsidiario de la muerte de su marido, quien falleció de una afección cardíaca después de que se le negara el ingreso en dicho centro sanitario.
La muerte acaeció el pasado 28 de marzo, y a raíz del hecho, el Sindicato Libre de la Marina atacó agriamente al sistema burocrático de nuestro país y, concretamente, a la Seguridad Social. Ahora la viuda interpondrá querella criminal contra el director del centro, dejando bien sentado que no se pretende atacar a nadie en concreto, sino a ciertas instituciones y a sus sistemas burocráticos. Era intención también querellarse contra la compañía Trasmediterránea, propietaria del buque donde prestaba sus servicios el marinero fallecido pero no podrán hacerlo debido a que está amparada por una ley.Pedro Muñoz Ripoll, de 42 años de edad, trabajaba como mozo de cubierta del citado barco y, al sentirse indispuesto, fue trasladado a la residencia sanitaria, donde se le diagnosticó cansancio. Tras recetarle uno fármacos, no aconsejaron su internamiento. Como a las pocas horas volviera a sentir los mismos dolores, insistió de nuevo para ser ingresado, a lo que se negaron rotundamente los médicos de guardia, aconsejándole que descansara en su domicilio. A las pocas horas, Pedro Muñoz fallecía sobre cubierta a consecuencia de un infarto de miocardio.
El entonces recién constituido SLMM (Sindicato Libre de la Marina Mercante) y la CNT denunciaron públicamente, a través de comunicados, la muerte del marinero y la irresponsabilidad profesional del cuadro médico de la residencia sanitaria de la Seguridad Social en Palma de Mallorca.