Mitterrand considera importante la fusión PSOE-PSP
«Estimo que la fusión del PSOE y del PSP es algo importante, y es una buena cosa para cada uno de los dos partidos. Por ello viajaré a Madrid mañana, domingo, en donde creo estarán presentes también los demás dirigentes de la Internacional Socialista. A esta manifestación, por lo que me concierne, no hay que buscarle otro significado», declaró a EL PAÍS el primer secretario del Partido Socialista francés, Francois Mitterrand, a lo largo de una conversación celebrada ayer a mediodía, en vísperas de la convención nacional de su partido, que se inicia hoy, sábado, y en la que el PS se planteará s...
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«Estimo que la fusión del PSOE y del PSP es algo importante, y es una buena cosa para cada uno de los dos partidos. Por ello viajaré a Madrid mañana, domingo, en donde creo estarán presentes también los demás dirigentes de la Internacional Socialista. A esta manifestación, por lo que me concierne, no hay que buscarle otro significado», declaró a EL PAÍS el primer secretario del Partido Socialista francés, Francois Mitterrand, a lo largo de una conversación celebrada ayer a mediodía, en vísperas de la convención nacional de su partido, que se inicia hoy, sábado, y en la que el PS se planteará sus problemas internos y externos a la vista de los resultados negativos de las elecciones parlamentarias de los pasados días 12 y 19 de marzo, en los cuales la izquierda perdió contra pronóstico.El señor Mitterrand nos declaró que, con motivo de su estancia en Madrid, no pensaba celebrar ninguna entrevista política, «salvo los encuentros a que pudiese dar lugar el acto oficial al que asisto. Con Santiago Carrillo, concretamente, no tengo prevista ninguna conversación, pero le veré, naturalmente, si asiste a la reunión del domingo. Carrillo y yo tenemos buenas relaciones». Interrogado sobre la apreciación que hacía del último congreso del Partido Comunista de España (PCE), el líder socialista respondió: «Es el único partido comunista que, en la práctica, ha desarrollado sus teorías hasta el final. En este sentido, el abandono del leninismo lo confirmaría. En efecto, el "golpe político", tal como lo concebía Lenin en una sociedad analfabeta prácticamente y no alimentada, es imposible en nuestras sociedades industriales. Los partidos comunistas de Occidente se han dado cuenta de esto, pero sólo el español ha sido consecuente. El francés no lo ha sido, y el italiano, aunque de manera más equívoca, tampoco.»
Mitterrand niega la existencia de una crisis interna en el socialismo francés
El señor Mitterrand se manifestó circunspecto o resignado frente a la actitud del PCF manifestada por el comité central anteayer, responsabilizando totalmente al PS de la derrota de la izquierda en los recientes comicios legislativos y negándose a rectificar ni su política ni su funcionamiento interno: «Yo no esperaba otra cosa. Es su problema. Por lo que concierne a la Unión de la Izquierda, lo quieran o no los partidos, la unión existe. Nosotros, los socialistas, hacemos un análisis social y a este nivel la Unión de la Izquierda es un hecho. ¿El programa común? Yo no lo rechazo, pero no es de actualidad. Hay que pensar que de aquí a las presidenciales de 1981 cada partido operará por su cuenta.»El líder del PS considera infundada cualquier cuestión sobre una eventual aproximación de su partido a la estrategia del presidente, Valery Giscard d'Estaing, y le parece novelesco que este último consiga un día alcanzar el consenso del 60% del electorado que necesitaría para confirmar el giscardismo. Respecto al gaullismo representado por Jacques Chirac dijo que «no es el gaullismo, sino una variante popular de la derecha».
Crisis socialista
-La victoria posible de la izquierda francesa se había presentado como una experiencia que sensibilizaría al resto de Europa occidental. Tras su fracaso, ¿cuál podría ser la fase siguiente y quién la simbolizaría?
-No sé qué responder -dice el señor Mitterrand- Es cierto que nuestra victoria hubiese influenciado a otros países. Ahora, no sé. Quizá Italia, quizá España..., o quizá haya que esperar otra vez a Francia.
El líder socialista francés asegura que a pesar del indudable efecto psicológico de un cierto desencanto producido por la derrota electoral, el PS continuará trabajando en el mismo sentido, unido a pesar del clima de crisis que le pronostica la prensa: «Se diga lo que se diga -afirmó-, el PS ganó electores en todas las regiones de Francia salvo en tres. Es cierto que no conseguimos el 26% que se nos prometía, pero no olvidemos que tuvimos en contra al poder, a todos sus resortes y al Partido Comunista. Respecto a la crisis que padecería el partido, nada más lejos de la realidad. Existen análisis y sensibilidades diferentes, y nada más.»
Elección presidencial
«Se ha dicho que Pierre Mauroy y Michel Rocard podrían competir conmigo a la hora de elegir el candidato para las próximas presidenciales. Sobre mi candidatura, anunciada anteayer sensacionalmente por Le Matin, lo único que puedo decir es que me enteré en la cama, a las siete de la mañana, cuando alguien llamó por teléfono. Por lo demás, es bueno y lógico que un partido no se centre en un hombre. Tiene que haber otros con ambiciones..., aunque estas ambiciones también es bueno que respeten las etapas.»
EL PAÍS interrogó, por su lado al señor Guindoni, dirigente del ala más a la izquierda del PS, el CERES, sobre las posibles divisiones del Partido Socialista:
«Todo lo que se especula en este sentido sólo merece el calificativo de absurdo», respondió.
En resumen, frente a la etapa de tres años que separan las últimas elecciones legislativas de las presidenciales, el líder socialista no reveló ningún proyecto sensacional, pero se manifestó seguro del trabajo de su partido en busca de la vía socialista específica de los tiempos presentes.
Días pasados, los parlamentarios del Consejo de Europa celebraron un coloquio sobre la eventual decadencia de los partidos políticos. «Naturalmente -estimó el primer, secretario del PS-, los ecologistas, como los feministas, están mejor preparados para tal o cual manifestación, e incluso proyectan su problemática con más exactitud. Esto por la sencilla razón de que un partido no se limita sólo al feminismo o al ecologismo.»