España y el Pacto Atlántico

«El debate está abierto en Madrid sobre la candidatura de España a la OTAN. Una intervención en el Senado del rninistro de Asuntos Exteriores, Marcelino Oreja, y una declaración de la UCD han revelado las preferencias atlantistas del Gobierno Suárez. Los medios políticos se han asombrado de que este tema se haya abordado tan rápidamente. (...) ¿Por qué este apresuramiento? Según la oposición de izquierda, Madrid ha sentido su aislamiento cuando la OUA lanzó su ofensiva, en febrero, contra las Canarias: los españoles constataron con amargura que Estados Unidos y Francia habían observado un sile...

«El debate está abierto en Madrid sobre la candidatura de España a la OTAN. Una intervención en el Senado del rninistro de Asuntos Exteriores, Marcelino Oreja, y una declaración de la UCD han revelado las preferencias atlantistas del Gobierno Suárez. Los medios políticos se han asombrado de que este tema se haya abordado tan rápidamente. (...) ¿Por qué este apresuramiento? Según la oposición de izquierda, Madrid ha sentido su aislamiento cuando la OUA lanzó su ofensiva, en febrero, contra las Canarias: los españoles constataron con amargura que Estados Unidos y Francia habían observado un silencio equívoco. Según opina la izquierda, la actitud americana era calculada; se trataba de demostrar a España que su interés estaba en ingresar en el club atlántico para evitar esas desdichas. (...)Estados Unidos se limita a dar buenos consejos sobre lo que le parece la mejor elección. (...)

La adhesión al Pacto Atlántico haría más coherente nuestra política exterior, dice el diplomático Javier Rupérez, responsable de las relaciones internacionales de la UCD. (...)

La UCD y Alianza Popular explican su atlantismo. Una neutralidad armada es imposible, aunque la fórmula sea popular en un país que ha esquivado las dos guerras mundiales. "España se encuentra más cerca del frente teórico que en 1939, debido a las nuevas armas."

Estas razones de los atlánticos chocan con las de la izquierda y las de extrema derecha. Los comunistas son hostiles a una fórmula que, según ellos, refuerza la política de bloques, acentúa, la hegemonía de las superpotencias y acelera la carrera de armamentos. Prefieren la actual situación, es decir, la prórroga del tratado con Estados Unidos, pero no renuncian a su oposición de principio a las bases militares extranjeras. La hostilidad de los socialistas, un 30% del electorado, es más irritante para los centristas. Estos afirman que después de haber adoptado un punto de vista similar al de Breznev hasta llegar a firmar un comunicado conjunto, el Partido Socialista propaga ahora un sistema europeo de defensa.(...)

13 abril