Interpelaciones sobre elecciones sindicales y retribuciones de los funcionarios

Los temas sindicales y retributivos suscitaron las intervenciones de los ministros de Trabajo y de Hacienda, cuyos razonamientos no convencieron plenamente a los líderes de CCOO y de UGT, señores Camacho y Redondo, por un lado, ni al socialista Ciriaco de Vicente, por otro, a propósito de sus planteamientos respectivos sobre los resultados de las elecciones sindicales y sobre la discriminación retributiva de algunos sectores de funcionarios publicos.El Estado favorece el amarillismo

Marcelino Camacho dijo que los datos sobre los resultados obtenidos por las centrales son c...

Los temas sindicales y retributivos suscitaron las intervenciones de los ministros de Trabajo y de Hacienda, cuyos razonamientos no convencieron plenamente a los líderes de CCOO y de UGT, señores Camacho y Redondo, por un lado, ni al socialista Ciriaco de Vicente, por otro, a propósito de sus planteamientos respectivos sobre los resultados de las elecciones sindicales y sobre la discriminación retributiva de algunos sectores de funcionarios publicos.El Estado favorece el amarillismo

Marcelino Camacho dijo que los datos sobre los resultados obtenidos por las centrales son ciertos, pero que el Gobierno desvirtúa los que corresponden a los no afiliados e independientes, para favorecer el sindicalismo amarillo. En su opinión los trabajadores han votado masivamente a las centrales de CCOO y UGT «para que ellas busquen el camino de ser una sola». Nicolás Redondo se interesó sobre la necesaria publicidad de los resultados electorales sindicales.

el ministro de Trabajo Rafael Calvo, defendió la objetividad de los datos ofrecidos por la oficina montada por su departamento y las facilidades ofrecidas a las centrales para su verificación y control.

Ciriaco de Vicente acusó al Gobierno de incumplimiento de la ley en lo que se refiere al incremento de las retribuciones a los funcionarios para 1978, que se han elevado en mayor cuantía para quienes las tenían más altas, conculcando los acuerdos de la Moncloa, al afectar a la retribución complementaria más que a la básica.

El ministro de Hacienda, Francisco Fernández Ordóñez, declaró que el incremento previsto se había distribuido en un 50% de aumento lineal y otro 50% proporcional, y que, aunque era cierto que podía haberse realizado otra distribución, ello no quiere decir que la solución adoptada sea ilegal, entre otras cosas porque la respalda la dirección general de lo contencioso.

El ministro y el diputado socialista coincidieron en la estructura inadecuada de la función pública, en la conveniencia de publicar los acuerdos de la Junta Central de Retribuciones y en la colaboración de los funcionarios con la subcomisión parlamentaria de retribuciones.