El hospital de Maudes, posible nueva sede de la Diputación
La Diputación provincial negocia actualmente con las Hermanas de San Vicente de Paúl, propietarias del hospital de Maudes cambiar este edificio de gran valor arquitectónico, obra de Alberto Palacio, por la residencia de ancianos de Navalcarnero y una cantidad en metálico.
El presidente de la Diputación, Enrique Castellanos, ha preferido no adelantar cifras económicas hasta que la operación no esté cerrada, aunque es seguro que el cambio y la restauración del hospital significarán entre quinientos y mil millones de pesetas.El mes pasado se creó una coordinadora de partidos políticos, cen...
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La Diputación provincial negocia actualmente con las Hermanas de San Vicente de Paúl, propietarias del hospital de Maudes cambiar este edificio de gran valor arquitectónico, obra de Alberto Palacio, por la residencia de ancianos de Navalcarnero y una cantidad en metálico.
El presidente de la Diputación, Enrique Castellanos, ha preferido no adelantar cifras económicas hasta que la operación no esté cerrada, aunque es seguro que el cambio y la restauración del hospital significarán entre quinientos y mil millones de pesetas.El mes pasado se creó una coordinadora de partidos políticos, centrales sindicales, asociaciones de vecinos, Aepden y Adelpha para conseguir que el hospital se destine a actividades culturales, sociales y una de sus alas a centro de subnormales. Adelpha menciona además un expediente que se tramita desde hace cuatro años, por el que el hospital podría pasar a pertenecer al Patrimonio Nacional.
El señor Castellanos defiende la idea de que la Diputación res tauraría y cuidaría el edificio perfectamente -tampoco el palacio de Correos y Telecomunicaciones se ha visto degradado por las funciones que realiza- y explica que la operación de cambio lleva gestándose mucho tiempo, rechazando la idea de que las supuestas prisas que se observan ahora tengan por objeto adelantarse a la resolución del expediente.
El presidente de este organismo sostiene también que todo se ha hecho de forma que la corporación que pueda resultar tras las elecciones municipales no se va a encontrar endeudada, y que las actuales dependencias de la Diputación se encuentran congestionadas y había que buscarles acomodo. El hospital de Maudes tendría así un fin noble, así como el actual palacete de la Diputación, que podría convertirse en museo, destinarse a funciones de representación del Gobierno, residencia de personajes ilustres, por ejemplo.