Un informe polémico

« Las organizaciones de empresarios y los sectores más conservadores de opinión se han lanzado a una. durísima campaña contra el informe de la ponencia que, en el marco de la comisión de trabajo del Congreso, ha estudiado el proyecto de ley sobre representación de los trabajadores en las empresas.Parece que, en efecto, se han producidó modificaciones de importancia en el texto original del Gobierno. De ahí a decir que esos retoques cambian "radicalmente" el sentido básico del proyecto de ley, media un evidente abuso dialéctico.

( ... ) Pero lo más importante es que, al amparo de este as...

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« Las organizaciones de empresarios y los sectores más conservadores de opinión se han lanzado a una. durísima campaña contra el informe de la ponencia que, en el marco de la comisión de trabajo del Congreso, ha estudiado el proyecto de ley sobre representación de los trabajadores en las empresas.Parece que, en efecto, se han producidó modificaciones de importancia en el texto original del Gobierno. De ahí a decir que esos retoques cambian "radicalmente" el sentido básico del proyecto de ley, media un evidente abuso dialéctico.

( ... ) Pero lo más importante es que, al amparo de este asunto, se han vuelto a poner sobre la mesa cuestiones que creíamos claramente debatidas y superadas. Así se dice en algún comentario editorial que el informe de la ponencia referida tiende a modificar el modelo económico que debe fijar la Constitución.

En ese argumento se efectúan dos presunciones a nuestro modo de ver, graves.

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Primero se insiste de nuevo, contra todas las doctrinas constitucionales, contra la lógica, casi contra el sentido común, en la idea de que la Constitución de 1978 defina un modelo económico concreto, siendo así que importantes fuerzas políticas del país se definen por modelos económicos distintos. ( ... )

Si la Constitución define un modelo económico concreto, como escaños en ambas Cámaras, el modelo de economía de mercado, condenaríamos irremisiblemente a los partidos socialista y comunista a incorporar en el acto a sus programas electorales la reforma constitucional. Así, la Constitución de 1978 nacería contestada por un amplísimo sector del electorado. Cuando las realidades son tan poderosas y estables, ¿para qué buscar cinco pies al gato? ¿Para qué buscar motivos artificiales de división ideológica del país? Bastantes problemas reales hay en España como para complicarnos las cosas con otros puramente especulativos

, 4 abril

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