Nuevas reuniones España-CEE sobre pesca

Para el jueves 19 se anuncian contactos oficiales entre España y la Comisión de las Comunidades Europeas, para estudiar, una vez más, el litigio pesquero hispano-comunitario, surgido a raíz de la extensión a doscientas millas de las aguas de pesca CEE.No se esperan resultados espectaculares. España sigue con su régimen interino, prorrogable cada mes, que le concede 202 licencias de pesca para faenar en aguas comunitarias.

Se sabe que Madrid, representa do por el director general de Pesca, Félix Bragado, insistirá por los conflictos de la pesca de bajura que enfrentan a españoles y franc...

Para el jueves 19 se anuncian contactos oficiales entre España y la Comisión de las Comunidades Europeas, para estudiar, una vez más, el litigio pesquero hispano-comunitario, surgido a raíz de la extensión a doscientas millas de las aguas de pesca CEE.No se esperan resultados espectaculares. España sigue con su régimen interino, prorrogable cada mes, que le concede 202 licencias de pesca para faenar en aguas comunitarias.

Se sabe que Madrid, representa do por el director general de Pesca, Félix Bragado, insistirá por los conflictos de la pesca de bajura que enfrentan a españoles y franceses. Sin embargo, parece excluido que obtenga ninguna satisfacción. El Gobierno francés no está para concesiones, a dos meses de las elecciones legislativas. La reunión del 19 será una más en la larga trayectoria de ¡das y venidas a Bruselas de los dirigentes pesqueros españoles. A escala comunitaria, los propios dirigentes de la CEE no encuentran salida a los problemas planteados por su régimen interno. El reparto de capturas entre cada Estado miembro enfrenta a los nueve. Irlanda y Dinamarca protagonizan las posturas duras, pero también la RI` de Alemania está preocupada por la suerte de sus pescadores, como hizo saber el lunes el propio canciller Schmidt, en carta enviada al presidente del Consejo de la CEE.

Finn Olav Gundelach, vicepresidente de la Comisión, responsable de la política pesquera, anunció ante el Consejo que «hay que aceptar una política de restricción de capturas, para salvaguardar las especies». Las propuestas de la CEE para 1978 suponen una reducción media del orden del 8 % en relación con las capturas de 1977.