Los corsos extenderán la lucha armada a Francia

Los nacionalistas corsos anunciaron el domingo que para conseguir la independencia de la isla extenderán la lucha armada hasta «el continente francés». Piensan poner en práctica esta nueva estrategia antes de los comicios legislativos de marzo de 1978. El líder autonomista, Max Simeoni, detenido desde el último 27 de septiembre, acaba de ser puesto en libertad provisional.En una conferencia de prensa clandestina, realizada en las cercanías de Ajacio, el Frente de Liberación Nacional de Córcega (FLNC) anunció que, tras «un respiro», iniciará de manera inmediata la lucha armada «contra el Estado...

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Los nacionalistas corsos anunciaron el domingo que para conseguir la independencia de la isla extenderán la lucha armada hasta «el continente francés». Piensan poner en práctica esta nueva estrategia antes de los comicios legislativos de marzo de 1978. El líder autonomista, Max Simeoni, detenido desde el último 27 de septiembre, acaba de ser puesto en libertad provisional.En una conferencia de prensa clandestina, realizada en las cercanías de Ajacio, el Frente de Liberación Nacional de Córcega (FLNC) anunció que, tras «un respiro», iniciará de manera inmediata la lucha armada «contra el Estado francés». Sus planes incluyen dos tipos de acción: la primera, «contra los elementos de la legión extranjera implantados en Córcega, a quienes expulsaremos con las armas». En segundo lugar, la «lucha llegará hasta el continente francés».

El comando clandestino que ofreció la rueda de prensa mostró a los periodistas el primer número de su diario El Rebelde, y también un fusil lanza- granadas que fue utilizado por los marines americanos en Vietnam y que no posee ningún ejército europeo.

El FLNC se ha infiltrado, según aseguraron sus portavoces, en todas las capas de la sociedad corsa: organizaciones, partidos políticos nacionales, administración, sindicatos, etcétera. El movimiento nació en mayo de 1976 de la fusión de otros dos grupos nacionalistas, la Justizia Paolina, y el Frente Campesino Corso de Liberación. Desde entonces, ha reivindicado varios atentados, pero hasta ahora no se ha podido evaluar su fuerza real.

En la referida reunión con los periodistas, el FLNC se declaró unido «a los pueblos oprimidos, como los vascos. Existe -indicó- una ayuda recíproca, ya que somos un pueblo pequeño que no puede permitirse rechazar ayudas exteriores».

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