Dos gasolineras y dos cafeterías, atracadas en siete horas

Cuatro atracos se registraron en Madrid en la noche del martes al miércoles, en el plazo de siete horas. Los establecimientos asaltados fueron dos gasolineras y dos cafeterías.Hacia las once de la noche del martes, una persona no identificada, armada con un fusil, amenazó al encargado de la gasolinera situada en la ronda de Segovia, 37, y le obligó a entregarle el dinero que tenía, 5.000 pesetas. Posteriormente amenazó con el arma al conductor de un Dodge, que se encontraba repostando, y le obligó a trasladarlo a la Casa de Campo, donde definitivamente se dio a la fuga.

A la una ...

Cuatro atracos se registraron en Madrid en la noche del martes al miércoles, en el plazo de siete horas. Los establecimientos asaltados fueron dos gasolineras y dos cafeterías.Hacia las once de la noche del martes, una persona no identificada, armada con un fusil, amenazó al encargado de la gasolinera situada en la ronda de Segovia, 37, y le obligó a entregarle el dinero que tenía, 5.000 pesetas. Posteriormente amenazó con el arma al conductor de un Dodge, que se encontraba repostando, y le obligó a trasladarlo a la Casa de Campo, donde definitivamente se dio a la fuga.

A la una menos cuarto de la madrugada del miércoles, tres personas, una de ellas armada con una escopeta de cañones recortados, penetraron en la cafetería Kingston's, de la calle de Bernabéu, donde tras encerrar a los cuatro empleados y siete clientes que se encontraban allí en aquel momento, se apoderaron de 25.000 pesetas y huyeron. Poco después, en la cafetería Beer, de la avenida de Valladolid, tres jóvenes armados, cuya descripción parece coincidir con los atracadore de la cafetería Kingston's, penetraron en el establecimiento a las dos de la madrugada, y tras disparar dos veces al aire, huyeron con 16.000 pesetas tras dejar encerrados en el sótano a tres empleados y tres clientes. Uno de los camareros fue golpeado con la culata de un fusil.

A las 6.30 de la mañana cuatro jóvenes armados llegaron a la estación de servicio situada en el kilómetro 4,100 de la carretera de San Martín de la Vega, donde, tras intimidar al encargado y cortar los cables del teléfono, se dieron a la fuga con un botín de 23.000 pesetas.

Según los testigos presenciales en los atracos a las dos cafeterías, producidos en un tiempo de una hora y cuarto, los atracadores podrían ser los mismos, ya que sus características eran muy similares.