Manifestación "ultra" en Bilbao

Una manifestación formada por cerca de un millar de personas recorrió hacia las dos de la tarde de ayer la Gran Vía de Bilbao, profiriendo gritos contra ETA y el Gobierno, después de haber asistido en la parroquia de San Vicente a un funeral por el presidente de la Diputación de Vizcaya.Jóvenes con la pegatina de AP repartían a la entrada del templo fotocopias de una carta que el señor Unceta había dirigido el pasado mes de enero a Martín Villa protestando en términos violentos por la legalización de la ikurriña.

Al término del funeral, cuyo oficiante dijo, entre otras cosas, que...

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Una manifestación formada por cerca de un millar de personas recorrió hacia las dos de la tarde de ayer la Gran Vía de Bilbao, profiriendo gritos contra ETA y el Gobierno, después de haber asistido en la parroquia de San Vicente a un funeral por el presidente de la Diputación de Vizcaya.Jóvenes con la pegatina de AP repartían a la entrada del templo fotocopias de una carta que el señor Unceta había dirigido el pasado mes de enero a Martín Villa protestando en términos violentos por la legalización de la ikurriña.

Al término del funeral, cuyo oficiante dijo, entre otras cosas, que «todos somos corresponsables del drama que está viviendo Vizcaya», los asistentes entonaron el Cara al Sol con el brazo en alto, para dirigirse seguidamente al Palacio de la Diputación precedidos por dos banderas españolas.

A lo largo de la marcha se repitieron los gritos insultantes contra Suárez, «ETA, asesina», «Con la amnistía se matan policías», «Gobierno dimisión», «Abajo los traidores» y «Ejército al poder». Una vez ante la Diputación fue rezado un padrenuestro antes de que nuevamente arreciaran las consignas anteriores.

El grueso de la manifestación se disolvió en este lugar de la Gran Vía, aunque un centenar de personas siguieron hasta el Gobierno Civil, donde exigieron que se colocase a media asta la bandera, deseo que fue satisfecho por un funcionario. Poco después asomaba al balcón una mujer, que, entre los aplausos de los manifestantes, les enviaba besos.

En el transcurso de la marcha se produjeron varias agresiones contra redactores gráficos, a los que trataron de quitar los carretes, lo que hizo necesaria la intervención de varios policías de paisano.

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