CCOO y USO exponen su alternativa a los metalúrgicos madrileños

La Unión Sindical Obrera (USO) y Comisiones Obreras (CC OO), presentaron ayer ante los 4.000 metalúrgicos que se concentraron en el Instituto Sindical Virgen de la Paloma, de Madrid, la alternativa laboral y sindical que proponen de cara a la negociación del próximo convenio colectivo.Los cuatro sindicalistas que intervinieron en la asamblea coincidieron en afirmar que las retribuciones salariales fijadas por el laudo arbitral vigente son insuficientes, y que el próximo convenio debe ser único para todo el sector y negociado por un comité de trabajadores elegidos democráticamente en las asambl...

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La Unión Sindical Obrera (USO) y Comisiones Obreras (CC OO), presentaron ayer ante los 4.000 metalúrgicos que se concentraron en el Instituto Sindical Virgen de la Paloma, de Madrid, la alternativa laboral y sindical que proponen de cara a la negociación del próximo convenio colectivo.Los cuatro sindicalistas que intervinieron en la asamblea coincidieron en afirmar que las retribuciones salariales fijadas por el laudo arbitral vigente son insuficientes, y que el próximo convenio debe ser único para todo el sector y negociado por un comité de trabajadores elegidos democráticamente en las asambleas. Dicho convenio, cuyas deliberaciones comenzarán el próximo otoño, afectará a 250.000 metalúrgicos.

La plataforma reivindicativa propuesta por ambas centrales, y apoyada por la UGT, SU y CSUT, establece un salario mínimo para el peón de 26.000 pesetas, cuarenta horas de trabajo. semanal, treinta días de vacaciones anuales, intervención de las centrales sindicales en los. expedientes de crisis y, por último, concesión de la amnistía laboral, reivindicación ésta en que se hizo especial hincapié, ya que, según dijo uno. de los oradores, «todos aquellos hombres que han sido despedidos por luchar para que nosotros hoy podamos estar celebrando esta asamblea, deben volver de inmediato a sus puestos de trabajo».

Respecto al tema de la unidad sindical, que en este sector es, por ahora, un intento fracasado debido a la separación en las primeras conversaciones entre centrales entre la UGT y los dos sindicatos convocantes de la asamblea, Comisiones Obreras y USO, recordaron que el primer intento serio de unidad sindical en la acción, la Coordinadora de Organizaciones Sindicales (COS) fue interrumpido precisamente por la UGT, pues esta central planteó la dimisión de los enlaces sindicales como condición necesaria para mantener dicha unidad, ya que la UGT consideraba que éstos eran un vínculo con los verticalistas. En este sentido, Adolfo Piñedo, de CC OO, señaló que «el único vínculo que han mantenido Comisiones Obreras y la USO con el verticalismo han sido las prolongadas estancias de algunos de sus miembros en Carabanchel». También se pronunciaron contrarios, a la propuesta de la UGT, SU y CSUT referente a la composición exclusiva de afiliados a las centrales sindicales del comité negociador, impidiendo de esta forma la inclusión de los trabajadores independientes.

El pacto social fue otra de las cuestiones duramente atacadas por los oradores y ratificada por la asamblea, ya que «no se puede hablar de congelación salarial sin hacer efectiva una congelación real de precios».

Adolfo Piñedo, al final de su intervención, destacó la tendencia pro ugetista de la información laboral de EL PAIS.

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