Siguen sin conocerse las causas exactas del accidente de Tenerife
Estados, Unidos terminó de investigar la colisión de dos aviones Boeing 747 en Santa Cruz de Tenerife el pasado 27 de marzo, sin que los investigadores norteamericanos hayan podido responder aún a la pregunta de por qué uno de los pilotos intentó despegar su avión sin permiso.Las cintas magnetofónicas que contenían las conversaciones en las cabinas de los dos aparatos, uno de la compañía norteamericana Pan Am, y el otro de la holandesa KLM, así como las conversaciones con la torre de control del aeropuerto, fueron devueltas por Washington a Madrid a fines del mes pasado, según supo ayer...
Regístrate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
Estados, Unidos terminó de investigar la colisión de dos aviones Boeing 747 en Santa Cruz de Tenerife el pasado 27 de marzo, sin que los investigadores norteamericanos hayan podido responder aún a la pregunta de por qué uno de los pilotos intentó despegar su avión sin permiso.Las cintas magnetofónicas que contenían las conversaciones en las cabinas de los dos aparatos, uno de la compañía norteamericana Pan Am, y el otro de la holandesa KLM, así como las conversaciones con la torre de control del aeropuerto, fueron devueltas por Washington a Madrid a fines del mes pasado, según supo ayer la agencia Efe
Tres preguntas quedan aún por resolver. ¿Fueron todas las transmisiones de radio de la torre y de los dos aviones recibidas por la torre y los dos 7479 ¿Recibió el capitán del avión holandés permiso de despegue y, en caso negativo, por qué intentó despegar?, y ¿siguió el piloto del aparato de la Pan Am por la pista principal, pasando la salida que se le instruyó tomar para llegar a la pista de servicio?
Según un funcionario norteamericano, la primera pregunta es fácil de contestar: todas las transmisiones de radio, salvo una, fueron recibidas en las cabinas de ambos aviones, pero no se puede responder si las transmisiones fueron entendidas por todos los miembros de la tripulación afectados.
La segunda pregunta sigue siendo la más difícil de contestar y contiene la clave del accidente.