Nace el Sindicato Autónomo de trabajadores Ciegos

Hay que partir de la situación concreta. Treinta mil ciegos se calcula que hay en España. De ellos, vendiendo el cupón, subsisten aproximadamente 13.600. El sueldo base de estos trabajadores está en función, única y exclusivamente, de los cupones y su venta. Como sueldo figura el 40% de ocho tiras y siete cupones, más el 20% de nueve tiras. Es decir, 528 pesetas. Los ciegos tienen además la obligación de venderlo todo. La única devolución que se les admite es de seis tiras diarias, siempre que esa devolución no se produzca en cinco días seguidos. En caso de enfermedad, el ciego recibe el 70% d...

Hay que partir de la situación concreta. Treinta mil ciegos se calcula que hay en España. De ellos, vendiendo el cupón, subsisten aproximadamente 13.600. El sueldo base de estos trabajadores está en función, única y exclusivamente, de los cupones y su venta. Como sueldo figura el 40% de ocho tiras y siete cupones, más el 20% de nueve tiras. Es decir, 528 pesetas. Los ciegos tienen además la obligación de venderlo todo. La única devolución que se les admite es de seis tiras diarias, siempre que esa devolución no se produzca en cinco días seguidos. En caso de enfermedad, el ciego recibe el 70% de esas 528 pesetas, es decir 369,60. El tiempo de venta no cuenta. Si hay suerte y se vende pronto -cada ciego, dependiendo de su antigüedad dispone de un número determinado de tiras- puede darse el trabajo por concluido.En este estado de cosas, surgió en Madrid y en otras regiones una reacción por parte de los invidentes. Concretamente en La Coruña -como hemos venido informando días atrás- el problema planteado saltó por un nuevo motivo: la obligatoriedad de que los ciegos retiraran para su venta los cupones el mismo día del sorteo y no el anterior. Esto hacía perder un tiempo que los propios invidentes califican de precioso, dado que las ventas se realizan eminentemente por la mañana. A todo esto se une la reivindicación ya tradicional del ciego: su integración. «Y es que al ciego -comentaba uno de ellos se le considera un ser inútil al que se asocia siempre, indefectiblemente, con una serie de tiras al pecho. La ley nos considera incapaces laboralmente, Así nuestra única opción es meternos en la Organización Nacional de Ciegos (ONCE), con los problemas que de ello se derivan, como -es la lateralidad de la formación. Nosotros estamos traumatizados por el cupón, créame.

Alguien dijo ya que la vida y la dependencia absoluta de la ONCE era más traumátizante que la propia ceguera.»

El sindicato

Fue así como, por alternativa, surgió la idea de crear este nuevo sindicato autónomo que acoge a todos los trabajadores ciegos, pertenezcan o no a la Organización Nacional. Según sus propias definiciones, este nuevo sindicato tiene como principios fundamentales: ser reivindicativo y de clase; es decir, se crea para defender las reivindicaciones inmediatas de los trabajadores ciegos, y está abierto a todos los que lo deseen. «Como sindicato de clase -dicen textualmente- se orienta hacia la supresión de la explotación del hombre por el hombre.» Se define también como sindicato unitario y en su seno pueden coexistir distintas concepciones políticas, ideológicas, religiosas y sindicales. Mantiene también la búsqueda de la unidad sindical libremente decidida por el conjunto de trabajadores. Se adjetiva como democrático y mantiene como presupuesto fundamental el respeto y garantía de la democracia interna basada en la práctica asamblearia. Autónomo e independiente, afirma que cada afiliado podrá pertenecer al partido y central sindical que prefieta.

Objetivos

Los objetivos del Sindicato Autónomo de Trabajadores Ciegos han sido definidos en ocho puntos.«La defensa de los intereses socioeconómicos y profesionales de todos los trabajadores ciegos y la mejora constante de sus condiciones de trabajo y de vida, así como fomentar el compañerismo y la solídaridad entre todos los afiliados.

La conquista dé los derechos y libertades sindicales, políticas y nacionales, y la lucha constante contra todo intento de marginar o excluir a los trabajadores ciegos de la participación democrática en la vida del país.

El acceso a la cultura y a la enseñanza a todos los niveles y la, promoción y defensa de un auténtico patrirrionio cultural de todos los trabajadores.

La conquista de una igualdad real del trabajador, de la mujer y del joven ciego: la promoción lahoral y la defensa de sus derechos específicos contra toda opresión o discriminación.

La intervención sobre los Órganos donde se toman las decisiones que afectan especialmente a los trabajadores ciegos y a sus familias.

La protección de la salud y.de la integridad física de los trabajadores y de la eficaz asistencia a los mismos y a sus familias en caso del invalidez, accidente, enfermedad, desocupación parcial o total, invalidez, vejez, etcétera; hasta alcanzar un completo sistema de seguridad social que termine con la actual situación que padecemos.

El pleno empleo, el desarrollo de la economía y la justa distri-, bución de la renta y el progreso técnico, científico y social.

La plena afirmación del papel fundamental e insustituible que el sindicato íiene en la construcción y el desarrollo de una sociedad democrática.»

La ONCE revisará mejoras económicas

El próximo día 15, según comunica Europa Press, se reunirá el Consejo Superior de Ciegos, presidido por el director general de Asistencia Social para resolver sobre la actualización de mejoras económicas para los afiliados de la ONCE, vendedores del cupón. Parece ser -continúa la misma agencia- que se concederán aceptables mejoras a tenor de los resultados económicos del primer trimestre de este año.