Martín Villa estudiará en Cerdeña la extradición de fascistas italianos

El ministro español de Gobernación, Rodolfo Martín Villa, se entrevista hoy, viernes, con el ministro italiano del Interior, Francesco Cossiga en Portochervo, en la isla de Cerdeña, de la que es natural el ministro italiano.No se ha anunciado el tema de la entrevista aunque el domingo por la tarde se promete una conferencia de prensa. En medios políticos italianos y diplomáticos se supone que el objetivo del encuentro será el reciente convenio sobre extradición entre Italia y España, ratificado anteayer por el Senado italiano. La aprobación definitiva de la Cámara es cuestión de días, y entonc...

El ministro español de Gobernación, Rodolfo Martín Villa, se entrevista hoy, viernes, con el ministro italiano del Interior, Francesco Cossiga en Portochervo, en la isla de Cerdeña, de la que es natural el ministro italiano.No se ha anunciado el tema de la entrevista aunque el domingo por la tarde se promete una conferencia de prensa. En medios políticos italianos y diplomáticos se supone que el objetivo del encuentro será el reciente convenio sobre extradición entre Italia y España, ratificado anteayer por el Senado italiano. La aprobación definitiva de la Cámara es cuestión de días, y entonces se podrá dar curso a los procedimientos de extradición pendientes. Italia ha solicitado la extradición de Stéfano della Chiaie, implicado en el intento de golpe de Estado de Borgesse y en la matanza de plaza Fontana, de Milán, que costó la vida a dieciséis personas. Otros fascistas italianos refugiados en España, y perseguidos por la justicia italiana, podrán ser reenviados a Italia.

Hasta ahora, se oponían a la firma de la convención.de extradición los comunistas. Los comunistas italianos han cambiado de actitud a medida que ha evolucionado la situación política española. El senador comunista Piero Pieralli, motivando esta vez su voto favorable a la firma de la convención, ha declarado: «Ciertamente no nos hacemos ilusiones que sea suficiente aprobar esta ratificación para poner a los criminales fascistas refugiados en España en la imposibilidad de causar daño. Algunos de ellos están en la cárcel porque están implica dos en atentados contra las instituciones democráticas españolas. Otros están sin embargo libres. Esto demuestra que existen todavía protecciones, connivencias y complicidades de sectores, responsables de los aparatos estatales, primero en España, pero también, aunque en menor medida, en Italia.»