Detenida una banda de "quinquis"

Una banda de quinquis ha sido desarticulada por inspectores de la Comisaría de Vallecas, como presuntos autores de más de cincuenta robos a establecimientos comerciales. Los detenidos son Jacoba Genil, de 51 años, cuyo papel era el de inductora, Bernardo Corredera, de treinta años, Francisco Corredera, de dieciséis; M. B. E., de quince, y M. A. Y. M., de doce. Todos ellos residían en una chabola situada en el kilómetro siete de la carretera de Andalucía. Según declaraciones de los dos menores, fugados desde hacía varios meses del colegio en que se hallaban a disposición del Tribunal Sup...

Una banda de quinquis ha sido desarticulada por inspectores de la Comisaría de Vallecas, como presuntos autores de más de cincuenta robos a establecimientos comerciales. Los detenidos son Jacoba Genil, de 51 años, cuyo papel era el de inductora, Bernardo Corredera, de treinta años, Francisco Corredera, de dieciséis; M. B. E., de quince, y M. A. Y. M., de doce. Todos ellos residían en una chabola situada en el kilómetro siete de la carretera de Andalucía. Según declaraciones de los dos menores, fugados desde hacía varios meses del colegio en que se hallaban a disposición del Tribunal Superior de Menores, La Jacoba les facilitaba alojamiento y comida a cambio de los objetos robados, e incluso, en algunas ocasiones llegó a maltratarles por no salir a robar durante la noche. El botín robado lo vendía la mencionada señora en el Rastro o en otros lugares de forma ambulante.En la chabola donde habitaban los presuntos ladrones se han encontrado objetos robados por valor de 200.000 pesetas. El método utilizado para el robo era el del montante, sistema que les resultaba especialmente fácil de utilizar dada la escasa estatura de los menores y del descuido de los propietarios que no cierran por dentro los montantes de las puertas.

Los establecimientos contra los que estos individuos han perpetrado sus robos eran tiendas de muebles, electrodomésticos, bares, bodegas, dos iglesias, una librería, zapaterías y en la Asociación Juvenil Buenos Aires.

Posteriormente, y en relación con estos robos, se detuvo a Justo Rivero, de dieciséis años, y a Eleuterio Rivero, de diecinueve. Todos ellos han pasado a disposición de la autoridad judicial competente, Juzgado de Guardia y Tribunal Tutelar de Menores.