‘Los Tigres’: buscándose la supervivencia en el fondo del mar
Tal vez no sea la mejor película de Alberto Rodríguez, pero continúa estando en forma: sabe contar historias y plasmar sentimientos
El resultado final en el cine y las series que se inventa Alberto Rodríguez (hasta su nombre carece de énfasis, todo en él suena natural y cotidiano, no alardea de creador, nunca se ha tirado el rollo en profesión tan cómplice de exaltar el ego) es lógicamente imprevisto, sus proyectos...
El resultado final en el cine y las series que se inventa Alberto Rodríguez (hasta su nombre carece de énfasis, todo en él suena natural y cotidiano, no alardea de creador, nunca se ha tirado el rollo en profesión tan cómplice de exaltar el ego) es lógicamente imprevisto, sus proyectos le pueden salir mejor o peor, pero siempre despiertan mi interés. Las historias que cuenta son ásperas y complejas, habitadas por personajes con transparentes zonas de sombra, frecuentemente amargas, capaces de transmitir verdad. Yo me creo todo lo que cuenta. Y durante un rato me quedo pensando en lo visto y oído. También me crea desasosiego. Me dejó tocado (el villano también puede actuar como un héroe) con la magnífica La isla mínima. Me provocó turbación la noche catártica de inacabable pasote en After. La evolución y los progresivos demonios que envuelven a los integrantes de Grupo 7. Aquella Sevilla inquisitorial, mugrienta y sórdida de la serie La peste. La obra de este señor posee autenticidad y talento.
Consecuentemente, me acerco con ilusión a Los Tigres. También con cierto mosqueo porque dos amigos con los que coincido permanentemente en el cine que nos gusta me hablan de ella con notable decepción. Pero estos también quedaron extasiados con una nadería pretenciosa con la que no puedo conectar ni durante cinco minutos titulada Los domingos, protagonizada por una cría que quiere ser monja, temática que no me atrae lo más mínimo ni en su planteamiento ni en su desarrollo. Seguiremos siendo fraternales amigos, pero la solidaridad en cuanto a gustos cinematográficos atraviesa una grave crisis. Y ocurre que no me desentiendo en ningún momento de lo que me cuenta Alberto Rodríguez en Los Tigres.
No me enamoran los personajes, pero les entiendo. Son perdedores con una existencia desgraciada y un oficio durísimo. Son buzos que reparan barcos petroleros. Y nadie sabe lo que se pueden encontrar en las profundidades marinas, pero está claro que el organismo se puede descomponer con inmediato peligro de muerte cuando llevas mucho tiempo dedicándote a esa profesión de infinito riesgo. El protagonista curra mucho y gana poco. Pero nunca ha sabido dedicarse a otra cosa Y cuando su cuerpo retorna a la superficie constata que su vida es un desastre. Su dura exesposa le reclama con razón que alimente a sus hijos si pretende seguir viéndolos. La empresa le exige que siga bajando incansablemente al fondo del mar, aunque el corazón le amenace con estallar.
Su única ayuda es una hermana de gesto amargo, alguien que no ha podido nunca ponerse de acuerdo con la vida, que le cuida, le comprende y le protege, a costa de renunciar a las escasas ilusiones que aún le quedan. Por ejemplo, largarse a otro lugar e inventarse una nueva existencia. Resulta conmovedora la relación cómplice, problemática y entrañable entre estos dos hermanos, que incluso duermen juntos si perciben el miedo del otro. Y habrá intriga y peligro inminente cuando el buzo descubra la codicia, que su existencia puede cambiar un poco si pilla algo del material peligroso y sabroso que transporta un barco controlado por la mafia más expeditiva y salvaje.
Es admirable el tratamiento visual del fondo del mar que ofrece esta película. A Antonio de la Torre siempre me lo creo. Aquí también. Ofrece verosimilitud, matices, angustia, determinación. Y está espléndida, sobria y sugerente una Bárbara Lennie con acento andaluz. Y me encantan la naturalidad, el casticismo y la gracia de Joaquín Núñez. Los Tigres tal vez no sea la mejor película de Alberto Rodríguez, pero continúa estando en forma. Sabe contar historias y plasmar sentimientos. Posee un estilo poderoso. Es un director con fiabilidad permanente. A seguir siempre.
Los Tigres
Dirección: Alberto Rodríguez.
Intérpretes: Antonio de la Torre, Bárbara Lennie, Joaquín Núñez, César Vicente, Melania Cruz.
Género: drama. España, 2025.
Duración: 109 minutos.
Estreno: 31 de octubre.