Cuarentena con Thelonious Monk, por Fernando Trueba
El director de cine y productor musical reclama hoy la atención sobre uno de los músicos más influyentes de la historia del jazz
Thelonious Monk es un género en sí mismo. Uno de los músicos más originales y desconcertantes del siglo XX. Una extraña mezcla de complejidad y simplicidad, de juego y profundidad.
Su manera de tocar y modo de componer son parejos. Es un individualista radical. Y sin embargo ha sido uno de los músicos más influyentes de la historia del jazz. Difícil para algunos, imagino la perplejidad del que primero escuchó la música de Monk!
Este concierto con su cuarteto en Tokio en 1963 es una magnífica puerta para entrar en Monk. Y,...
Thelonious Monk es un género en sí mismo. Uno de los músicos más originales y desconcertantes del siglo XX. Una extraña mezcla de complejidad y simplicidad, de juego y profundidad.
Su manera de tocar y modo de componer son parejos. Es un individualista radical. Y sin embargo ha sido uno de los músicos más influyentes de la historia del jazz. Difícil para algunos, imagino la perplejidad del que primero escuchó la música de Monk!
Este concierto con su cuarteto en Tokio en 1963 es una magnífica puerta para entrar en Monk. Y, para los que ya están dentro, un alegre y relajante paseo dominical.
La grabación es excelente. Uno de los mejores directos de la época. Butch Warren en el bajo y Frankie Dunlop en la batería están regios, impecables e implacables, y les consienten todos sus caprichos al saxo de Charlie Rouse y a Monk, que se divierten como dos niños en una juguetería.
El repertorio son temas de Monk y uno de sus standards favoritos.
Escucha directamente en Spotify esta y otras playlists de EL PAÍS