Radiografea

Los presupuestos generales del estado son la radiografía del país. Conocer cómo se distribuyen las partidas económicas seguramente nos evitaría muchos discursos incendiados, prejuicios interesados y frases hechas. Pero a ver quién es el guapo que se pone con boli, papel y lupa a analizar segmento por segmento el esqueleto de la financiación del estado. Así que los titulares de prensa y los destacados de radio y televisión hacen el trabajo de síntesis. Los españoles hemos ido al traumatólogo y sin entrar mucho en detalles nos ha dicho que tenemos más roturas que huesos y que a partir de ahora a...

Los presupuestos generales del estado son la radiografía del país. Conocer cómo se distribuyen las partidas económicas seguramente nos evitaría muchos discursos incendiados, prejuicios interesados y frases hechas. Pero a ver quién es el guapo que se pone con boli, papel y lupa a analizar segmento por segmento el esqueleto de la financiación del estado. Así que los titulares de prensa y los destacados de radio y televisión hacen el trabajo de síntesis. Los españoles hemos ido al traumatólogo y sin entrar mucho en detalles nos ha dicho que tenemos más roturas que huesos y que a partir de ahora asumamos que medimos veinte centímetros menos de talla. Fea radiografía.

En España, hoy por hoy, hasta los mendigos están viviendo por encima de sus posibilidades. Es una frase esa de que vivimos por encima de nuestras posibilidades que gusta mucho aplicar, pese a que esconde clasismo, mala leche y una enorme mentira.. Los mendigos de España han sido siempre retratados por el maestro Mingote con el escepticismo y la filosofía distanciada de quien observa la vida desde abajo, que es una posición bastante más clarividente que desde arriba. Pues resulta que los mendigos de Mingote estaban viviendo por encima de sus posibilidades y además se han quedado sin Mingote, cuya llegada al Cielo seguro que convierte el Lugar en un Sitio mucho más agradable y educado.

Este país nuestro en metástasis sigue apalancado en sectores productivos caducos y aún no se atreve a reconocer que muchos de los parados que ha arrojado fuera del sistema no volverán jamás a encontrar trabajo. País que reduce investigación, ciencia, cultura, educación, ayuda a dependientes y cooperación internacional, pero que aumenta la partida de deportes y su hermana, la analítica antidoping; y elige con puntería exquisita sobre quién dicta las amnistías y los indultos. Sin planteamiento serio y razonado sobre cuáles son las industrias que sostendrán las economías avanzadas dentro de 25 años, España ahora solo tiene la urgencia de llegar a fin de mes salvada del rescate financiero. Las prioridades son las prioridades. Los ciudadanos irán esta mañana a cumplir con su obligación y ojearán los desgloses del presupuesto. Esto es lo que hay, se dirán, o mejor aún, esto es lo que no hay.