La Cámara de Diputados de Chile rechaza el intento de destituir a Carolina Tohá, ministra del Interior de Boric

La Cámara de Diputados y Diputadas ha rechazado este jueves el intento de destitución de la ministra del Interior y Seguridad Pública, Carolina Tohá, impulsado por el Partido Republicano, de la derecha dura, que le achaca su responsabilidad en la crisis de seguridad que atraviesa Chile. La acusación constitucional, ingresada en el Congreso por los republicanos y apoyada por la Unión Demócrata Independiente (UDI) y Renovación Nacional (RN), de la derecha tradicional, ha sido desestimada por 76 votos en contra, 67 a favor y siete abstenciones. La posición de los parlamentarios de centro, alineada con la de la izquierda, fue clave para el resultado.

Esta es la sexta acusación constitucional –un procedimiento similar a un impeachment en otros países–presentada por la oposición en contra de un ministro del Gabinete de Gabriel Boric. Todas han fracasado. El libelo ha ocurrido a menos de un mes para las elecciones municipales y de gobernadores que se celebrarán el 26 y 27 de octubre.

Al finalizar la sesión, Luis Sánchez, jefe de la bancada de los diputados republicanos, dijo que se acercaron a conseguir los votos para avanzar en una remoción de la ministra Tohá, pero que “una vez más una mayoría circunstancial” se había puesto de lado del Gobierno para mantener a quien consideran “responsable directamente por la crisis de inseguridad”. Hacía alusión a diputados de formaciones políticas como el Partido Demócrata Cristiano y Amarillos por Chile, pero sobre todo de Evópoli –parte del ala moderada de la coalición de derecha Chile Vamos– que no respaldaron la acusación.

El mayor espaldarazo a la gestión de Tohá ha provenido de Ricardo Yáñez, quien fue general director de Carabineros hasta el 27 de septiembre, cuando renunció para enfrentar un proceso de formalización de cargos por su presunta responsabilidad en el delito de omisión de apremios ilegítimos con resultado de lesiones graves y homicidio en el marco del estallido social a fines de 2019, momento en el que dirigía el departamento de Orden y Seguridad. Según el exjefe policial, la secretaria de Estado ha “trabajado como nunca frente a un fenómeno que es absolutamente nuevo y emergente en nuestro país” y que acusarla como la “responsable de todo lo que se ha generado en materia de criminalidad” sería una injusticia.

La caída de la acusación constitucional ofrece un respiro a la Administración de izquierdas. “Hoy ganamos jugando limpio y con la verdad. Pero sinceramente no hay ni sentimos que haya nada qué celebrar, especialmente porque la batalla que queremos ganar no es esta, sino una que se juega en las calles y con otras herramientas”, ha dicho Tohá.

La violencia ha crecido de manera acelerada en los últimos dos años en Chile. El país sudamericano registró una tasa de 6,3 víctimas de homicidios consumados por cada 100 mil habitantes en 2023, un 6% menos que los ocurridos en 2022. También la percepción de inseguridad se ha disparado en el país. De acuerdo con la última Encuesta Nacional Urbana de Seguridad Ciudadana (ENUSC), elaborada por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) y publicada en agosto, un 87,6% de las personas perciben que la delincuencia se incrementó en los últimos 12 meses. Tohá, quien ha reconocido el incremento de la inseguridad, ha asegurado que se necesitan construir acuerdos para abocarse a mejorar la seguridad.

El presidente Boric ha resaltado el papel de la ministra como “una tremenda servidora pública que ha puesto lo mejor de sí” en el combate de la inseguridad y ha pedido a la derecha, que en el pasado acusó a la izquierda por presentar acusaciones constitucionales “infundadas” durante el Gobierno de Sebastián Piñera (2010-2014 y 2018-2022), “parar con esta lógica destructiva que le hace mal a Chile”. En su cuenta de X, el mandatario chileno ha recalcado: “Muchos hemos hecho una autocrítica al respecto. Lo que resulta inexplicable es que si nos criticaban por actuar de una manera, terminen haciendo exactamente lo mismo.

Antes, el diputado Francisco Undurraga, de Evópoli, que se opuso a la acusación constitucional a pesar de no respaldar la gestión de la ministra, ha reconocido que se llega a un momento en el cual no se puede seguir actuando impulsados por revanchismo.