La Fabra i Coats recupera su centro de arte y de creación
Colau ha cedido cinco pisos nuevos en el recinto para albergar a artistas residentes
La antigua hilatura Fabra i Coats, en el distrito de Sant Andreu de Barcelona, recupera su Centro de arte contemporáneo y Fábrica de Creación bajo la marca FiC. Que, como acertó ayer un compañero periodista, igual sirve para referirse a Fabra i Coats que a “fábrica” y “centro de arte”. La flamante directora del centro del Ayuntamiento de Barcelona, Joana Hurtado, que ganó el concurso convocado por el Instituto de Cultura a comien...
La antigua hilatura Fabra i Coats, en el distrito de Sant Andreu de Barcelona, recupera su Centro de arte contemporáneo y Fábrica de Creación bajo la marca FiC. Que, como acertó ayer un compañero periodista, igual sirve para referirse a Fabra i Coats que a “fábrica” y “centro de arte”. La flamante directora del centro del Ayuntamiento de Barcelona, Joana Hurtado, que ganó el concurso convocado por el Instituto de Cultura a comienzos de este año, presentó su proyecto.
“Un espacio que dé cabida a todo el proceso creativo, desde la inspiración hasta la creación hasta la producción y la exhibición”, defendió, y que aúne la pata del centro de arte con la fábrica de creación. Donde habrá artistas residentes. Las convocatorias para las residencias, que podrán usar los espacios de forma gratuita, se convocarán en breve e incluirán becas. Estos artistas incluso podrán vivir en los cinco pisos nuevos de un edificio de vivienda social ubicado en el mismo recinto que el gobierno de la alcaldesa Ada Colau ha decidido ceder para este fin.
El Ayuntamiento quiere crear una red de espacios residenciales para artistas y también habilitará para este fin Vil.la Joana, en Collserola. Lo explicó el teniente de alcalde Cultura, Educación y Participación, Joan Subirats, que acompañó a Hurtado en la presentación. Las estancias de los artistas, ha dicho, podrán oscilar entre una semana y tres meses.
La FiC tendrá un presupuesto anual de 1,6 millones de euros, en un 90% aportados por el ejecutivo municipal y el resto por la Generalitat, reveló el edil. En global, la antigua fábrica tiene 15.000 metros cuadrados.
Joana Hurtado, que en los últimos años había dirigido el centro cívico Can Felipa, especializado también en arte, convino que un centro de arte es “una necesidad” para Barcelona y que todas las grandes ciudades europeas tienen centros de arte. La FiC, dijo “debe ser y será un centro de arte sólido, referente local, nacional e internacional gracias a una programación estable y continuada”. Su proyecto contempla seis exposiciones anuales, con creaciones y comisionados locales e internacionales y con modelos distintos: intinerancias o coproducciones.
La directora situó como tres pilares de la nueva etapa del centro “la libertad de expresión y buenas prácticas profesionales, la transparencia y la sostenibilidad en la gestión y la igualdad y equidad”. Hurtado dijo que se ha concedido “nueve meses para parir la criatura” y que la FiC arrancará su nueva vida en 2020. Además, propuso hacer un simposio con el sector, al que quiere invitar a creadores emergentes —“que no tienen por qué ser jóvenes”, apuntó—, artistas, productores, bailarines, videoartistas... en una apuesta por integrar todas las disciplinas posibles. De entrada, el equipamiento tiene un equipo de entre seis y ocho personas y contará con empresas externas en función de las necesidades de producción. La FiC será de entrada gratuita y abrirá de martes a viernes todo el día y los domingos por la mañana.