El ‘casting’ del PSOE frente a Carmena
Pepu Hernández, Manuel de la Rocha y Chema Dávila protagonizan desde hoy las primarias socialistas, claves para que la izquierda mantenga la capital
El casting del PSOE para elegir al candidato que peleará con Manuela Carmena por la hegemonía de la izquierda en la capital comienza hoy. El exseleccionador Pepu Hernández; el exdiputado Manuel de la Rocha; y el concejal Chema Dávila se medirán para convencer a los militantes socialistas de que están listos para asumir un reto mayúsculo. El ganador de las primarias tendrá la doble misión de luchar por el presente —rescatando al PSOE del último puesto en las encuestas— y por el futuro —proyectándose durante la legisl...
El casting del PSOE para elegir al candidato que peleará con Manuela Carmena por la hegemonía de la izquierda en la capital comienza hoy. El exseleccionador Pepu Hernández; el exdiputado Manuel de la Rocha; y el concejal Chema Dávila se medirán para convencer a los militantes socialistas de que están listos para asumir un reto mayúsculo. El ganador de las primarias tendrá la doble misión de luchar por el presente —rescatando al PSOE del último puesto en las encuestas— y por el futuro —proyectándose durante la legislatura como sustituto al frente de la izquierda de Carmena, que difícilmente volverá a presentarse en 2023—.
Manuel De la Rocha: Un abogado laboralista con experiencia como alcalde y diputado
De los tres candidatos, Manuel de la Rocha (Madrid, 62 años) es sin duda el que atesora más experiencia política: fue alcalde de Fuenlabrada tras las primeras elecciones democráticas, y luego consejero de Educación de la Comunidad de Madrid, además de diputado regional durante dos legislaturas y diputado en el Congreso en otras tres. Es también el socialista con más años de carné, ya que se afilió al PSOE desde su legalización y, más adelante, fundó la corriente interna Izquierda Socialista. Su faceta como abogado laboralista en UGT y en defensa de los derechos de los trabajadores le ha granjeado muchos apoyos. “Manolo es un referente ético”, dijo de él Cándido Méndez, exsecretario general del sindicato en el que De la Rocha ha militado durante cuatro décadas. Sindicalistas y militantes del PSOE con muchos años a sus espaldas llenaron el Círculo en su presentación, el pasado 19 de febrero.
"Nuestra labor de oposición ha quedado un poco difuminada: por un lado apoyábamos a la alcaldesa, y por otro no estábamos en el equipo de Gobierno", explica el secretario general del PSOE en Madrid, José Manuel Franco. "Algunas de las medidas más importantes que se han adoptado han sido iniciativa socialista, pero han parecido debidas a la gestión de Carmena y de Ahora Madrid", defiende Franco, que pone como ejemplo la gratuidad de las escuelas infantiles. "Las primarias deben animar a todos los militantes a participar para sacar una candidatura fuerte que esté en condiciones de disputar la alcaldía". Y remata: "No está escrito en ningún sitio que vaya a ganar Carmena".
El PSOE se ha movido entre dos registros durante la legislatura. La voz socialista ha sonado dura desde la oposición que han ejercido concejales como Mar Espinar y Mercedes González, y conciliadora pero firme a través de la portavoz Purificación Causapié, que ha apostado por buscar acuerdos con el equipo de gobierno para sacar sus iniciativas adelante.
El problema para el PSOE es que esos proyectos han acabado engullidos por la acción de gobierno. Los socialistas afrontan las elecciones como segunda fuerza de la izquierda por primera vez en su historia. Y por eso sus estrategas consideran imperativo encontrar un líder que sirva de contrapeso a Carmena, y que impida que la alcaldesa se convierta en el único referente de la izquierda.
Chema Dávila: La cara amable del PSOE municipal que impulsó Madrid Central
Chema Dávila (Madrid, 47 años) se ha colado por sorpresa entre los otros dos candidatos a las primarias tras una legislatura en la que ha sido una cara amable del PSOE municipal. Ingresó en el partido hace dos décadas y es secretario general de la Agrupación Socialista del distrito de Centro. Su labor como portavoz de Movilidad y Medio Ambiente le ha supuesto impulsar la iniciativa más novedosa de la legislatura, el área de tráfico restringido Madrid Central. “Era nuestra propuesta estrella en el programa electoral”, reconoce. También apoya otras iniciativas para facilitar una movilidad sostenible, como los semáforos de la A-5 que se estrenaron ayer. Licenciado en psicología, se animó a presentarse contra viento y marea precisamente por esta experiencia, que le han hecho tener un proyecto de ciudad. Antes de la política, trabajó 15 años como autónomo en la ferretería que heredó de su padre.
Esa rivalidad electoral, sin embargo, será complicidad el día después de las urnas. Que la izquierda mantenga el gobierno de Madrid depende del resultado de Más Madrid, del tirón del aspirante socialista y de que IU logre representación: la irrupción de Vox anima a la derecha a pensar que podrá recuperar la capital en combinación con el PP y Ciudadanos.
De entre los tres candidatos que quedan —descartada la cuarta aspirante, Marlis González—, el favorito del aparato es Hernández. Ha sido también quién más apoyos ha logrado recoger de la militancia, aunque el precedente de la contienda entre Pedro Sánchez y Susana Díaz demuestra que los avales no se traducen necesariamente en votos. A pesar de que los paracaidistas no suelen gustar en el PSOE, podría conseguir despertar la ilusión de la militancia. De la Rocha tiene de su parte la experiencia en política y en gestión. Dávila, menos conocido, es quién más al día está de la actualidad local. La militancia decidirá el 9 de marzo.
Pepu Hernández: Un independiente ajeno a la política con el apoyo de Pedro Sánchez
José Vicente PepuHernández (61 años) ha llegado a la política de la mano del líder del PSOE, Pedro Sánchez, que apoya explícitamente su candidatura.
Exentrenador del Estudiantes, donde coincidió con el presidente del Gobierno, y exseleccionador nacional de baloncesto, donde conquistó el oro del mundial al frente de una generación irrepetible de jugadores, el aspirante siempre mostró su inquietud por la política. Lector insaciable de periódicos, atento observador del movimiento del 15-M, y convencido de la capacidad transformadora de la educación y los valores que transmite el deporte, Hernández siempre fue la espita que abrió los debates sobre la actualidad en los equipos que dirigió.
Ahora, tras pasar casi un mes reuniéndose con las agrupaciones socialistas de la capital, se prepara para su primera final política: ganar las primarias.